En ocasión de su cuarto informe de gobierno (oficial), el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que en México “ ya no domina la oligarquía sino existe un gobierno democrático, cuya prioridad son los pobres, la corrupción no se tolera ni hay impunidad para nadie. Se acabaron los privilegios fiscales”.
Desde Palacio Nacional el mandatario aseguró que los funcionarios de su gobierno viven en el marco de la justa medianía, actúan con eficacia y honradez. “!Que nadie se confunda o se haga el que no sabe. En nuestro gobierno no hay personas como García Luna”.
En lo que constituyó el mensaje mas corto de los que ha rendido (este fue el 16, contabilizando todos los informes trimestrales), en el cual aseveró que se está ganando la batalla contra el racismo, clasismo y discriminación.
En su evaluación del estado que guarda la nación subrayó que hay gobernabilidad, prácticamente no hay expresiones de inconformidad y se ha garantizado la libertad de expresión y el derecho a disentir como nunca.
“Les confieso que ahora poseo más aplomo y serenidad que antes, ha crecido aún más , sin duda mi respeto y el amor al pueblo creó con racionalidad y optimismo, que triunfará la cuarta transformación de México” Agradeció a quienes han participado en” en esta odisea en pos de la felicidad del pueblo.”.
Ante sus más cercanos colaboradores, sólo en el gabinete legal y ampliado que fueron colocados dijo que “Y en lo personal, me siento bien y de buenas. Estoy feliz porque la revolución de las conciencias ha reducido al mínimo el analfabetismo político”
Se reducen brechas sociales con políticas de austeridad
López Obrador destacó que gracias a las políticas de ahorro y recaudación aplicadas en su administración, se ha logrado incrementar los recursos para dirigirlos a los más pobres, y con ello reducir las brechas sociales en el país.
Remarcó que puede comprobar que su plan para luchar contra corrupción y la impunidad y para combatir los lujos en el gobierno ha permitido que las arcas de la hacienda pública cuenten con alrededor de 2.4 billones de pesos extra o adicionales; además que la política para evitar la condonación y evasión de impuestos ha dejado ingresos excedentes por un billón 700 mil millones de pesos más.
Destacó en gran medida que el propio presidente de Estados Unidos, Joe Biden, “mi amigo”, le hizo saber hace poco a través de una carta que el comercio bilateral en bienes ha alcanzando un récord histórico de 384 mil millones de dólares.
El mandatario federal reconoció que si bien no ha habido crecimiento económico en el país, el bienestar de las personas con menores recursos ha mejorado y hoy las brechas entre los que más perciben y quienes menos son menores; el peso no se ha devaluado, México se mantiene como un polo de inversión extranjera y las remesas son ingresos esenciales para las familias más pobres.
“Aún con los grandes problemas externos que hemos enfrentando como la pandemia y la guerra en Ucrania, que han precipitado la crisis económica en el mundo, en nuestro país los datos indícan que estamos mejorando”.
En esto, enfatizó, han ayudado dos factores, “dos elementos buenos”: la estrategia de apoyo a los de abajo, “eso no debemos de omitirlo”; y las ventajas del tratado comercial de nuestro país con sus vecinos Estados Unidos y Canadá.
“Los programas para el bienestar, la recuperación del poder adquisitivo de los salarios y al aumento en las remesas enviadas por nuestros queridos paisanos a sus familiares han mejorado la situación económica de la población mas pobre del país, y al garantizarse cuando menos lo básico se ha mantenido la paz y ha permanecido encendida la llama de la esperanza”, planteó en Palacio Nacional, al pie del histórico mural de Diego Rivera, Epopeya del pueblo mexicano.
Ante funcionarios de su gobierno, el jefe del Ejecutivo insistió que México está considerado en el mundo como uno de los países con mas potencial para invertir y hacer negocios. “Sigue llegando inversión extrajera, y durante nuestro gobierno, en dos años, se han logrado niveles históricos. En el primer semestre de este año la inversión foránea creció en 12 por ciento, en comparación con el mismo periodo del año pasado”.
Ubicó en el aumento al salario, en el reparto de utilidades y los Programas para el Bienestar como los factores y medios “eficaces” para la distribución más justa de la riqueza; además que el peso no se ha devaluado, han aumentado las reservas del Banco de México en 14 por ciento.
El mandatario abrió su cuarto informe de gobierno –marcado por la Constitución— y el decimoquinto de los que ofrece cada tres meses, con el tema económico.
Reconoció que en estos años “hemos enfrentado grandes desafíos como la pandemia y la crisis económica que se precipitó con su infausta llegada. Sin embargo, son estas difíciles circunstancias las que nos ponen a prueba y permiten dejar de manifiesto si funciona o no el proyecto de cambio o transformación que postulamos y llevamos a la práctica”.
Así, subrayó, pese a las adversidades globales “estamos saliendo adelante, como lo demuestran los resultados. Se nos cayó la economía, pero ya logramos recuperar los niveles previos al Covid. Hoy existen inscritos al IMSS 21 millones 236 mil 866 trabajadores, es decir, 623 mil 330 más que antes de la pandemia”.
Insistió en su postulado que lo más valioso no es el crecimiento macroeconómico, sino una mejor distribución del ingreso, gracias a lo cual “hemos logrado aminorar la desigualdad y la pobreza. De acuerdo con la última encuesta nacional de ingresos y gastos de los hogares levantada por el Inegi entre agosto a noviembre del 2020, en plena pandemia, mientras en 2018 los más ricos ganaban en promedio 18 veces más que los pobres, en 2020 esa desigualdad se redujo a 16 veces”.
El presidente refirió que en ese periodo, los más pobres “fueron los únicos que vieron crecer sus ingresos, en 1.3 por ciento”, lo cual conforma que mientras en los hogares del medio urbano perdían a causa de la pandemia 8 por ciento de sus ingresos, en el ámbito rural se registró un incremento del 3.8 por ciento.
Los programas para el bienestar impulsados por su administración, aseveró, permitieron que entre 2018 y 2020 los adultos mayores incrementaran ingreso promedio trimestral por persona de 12 mil 420 a 13 mil 586 pesos; y en cuanto a la población indígena los ingresos por persona cada tres meses pasaron de 8 mil 887 a 10 mil 57 pesos, es decir, 13.16 por ciento más.
Otros datos aportados por el jefe del Ejecutivo federal muestran, de acuerdo al Coneval, que en el segundo trimestre de este año el ingreso laboral real por persona se creció 4.8 por ciento, al pasar de 2 mil 747 a 2 mil 880 pesos en comparación con el mismo periodo de 2021.
“Estos datos reafirman nuestra tesis de que no basta el crecimiento económico, sino que es indispensable la justicia”.
Enfatizó que más allá del simple crecimiento económico, “lo fundamental estriba en desterrar la corrupción y los privilegios para destinar todo lo obtenido y ahorrado en beneficio de la mayoría del pueblo y de manera especial de los más pobres y marginados”.
Destacó los planes que ha emprendido desde el gobiernos para lograr ahorros, erradicar la corrupción, el robo de combustibles y la mejora en la recaudación de impuestos.
Gracias las estrategias contra la impunidad, la corrupción y para erradicar los lujos gubernamentales, planteó, se ha contado con 2.4 billones de pesos extra; a eso se debe sumar un billón 700 millones de pesos de ingresos excedentes por la cancelación de la condonación de impuestos a los grandes contribuyentes y el combate a la evasión.
Además, el combate al huachicol ha detenido la fuga de un capital equivalente a 200 mil millones de pesos; mientras el ahorro en el costo de obras públicas ha permitido que la hacienda pública disponga de una cifra similar; más 300 mil millones de pesos obtenidos por el plan de austeridad republicana.
“Todo esto se refleja en la estabilidad financiera que hemos logrado, sin aumentar los impuestos, subir los precios de los combustibles o endeudar al país. Este año pese de la inflación, 8.2 por ciento y del subsidio a las gasolinas y el diésel, 293 mil millones de pesos, los ingresos del gobierno federal se han incrementado en 2.4 por ciento en términos reales con relación al mismo periodo del año pasado”.
Fuente: La Jornada
