La conductora de Televisa Laura Bozzo negó ser propietaria de inmuebles diversas ciudades y amenazó a la revista Proceso por reproducir una investigación de sus bienes hecha por Reporte Índigo. El amago fue este sábado en su cuenta de Twuitter, la que, por cierto, dijo que iba a cerrar.
“GRACIAS hoy tengo como demandar a PROCESO ven como mienten reporte de mis propiedades MIAMI comprada por Telemundo esta hipotecada,HERRADuRA” (sic), tuiteó Bozzo.
Además agregó en la red social que “hErRADURA pagada con la herencia de mis padres que me dejaron mucho dinero, Acapulco a la firma de mi contrato con Televisa me la dan”.
“Pero estoy MUY FELIZ porque el circo no lo hice yo lo hizo proceso y ahora tendra que probar sus mentiras tengo todo documentado mil besos”, aseguró.
“Nunca tuve ninguna empresa en Miami no se a quien se refieren y mi hija trabaja y se compra con su plata lo que quiere cual es su problema”, señaló.
“Para que quede bien claro Acapulco NO es mio es parte de mi contrato ok gracias”, agregó.
Los mensajes de Twitter fueron a partir de una nota que publicó la revista proceso titulada “Revelan que Bozzo tiene propiedades de lujo en Miami, Edomex y Acapulco”.
A continuación parte del texto de la nota publicada por Proceso:
De acuerdo con Reporte Índigo, Bozzo tiene varias propiedades en Acapulco, El Estado de México y Miami.
El portal indica, con base en datos del registro público de la propiedad de Miami, que en marzo de 2002 la conductora adquirió una propiedad frente al mar en una exclusiva zona residencial cerca de la isla de Bal Harbour.
Agrega que la residencia, de mil 421 metros cuadrados, tiene un valor de 1.5 millones de dólares y consta de tres pisos, cuatro recámaras, el mismo número de baños y piscina, además de salida directa al mar.
Según el portal, el año pasado Bozzo pagó unos 600 mil pesos de predial por esta casa.
En 2008 la prensa de Perú reveló que Laura mantenía un pleito bancario sobre otra residencia en Miami comprada en 1992, la cual tenía un valor de 3.5 millones de dólares.
Bozzo afirmó en aquel entonces que debía un millón de dólares y que tenía un plazo de 20 años para liquidar el saldo.
Reporte Índigo asegura que esta propiedad no está a su nombre, el de su pareja ni el de sus hijas en los registros públicos de Florida.
Fuente: e-consulta.com