Un extraño, “chillido” sobrenatural saludó nave espacial Voyager I, de la NASA, una vez que se convirtió en el primer objeto hecho por el hombre para entrar en el espacio interestelar.
Un “chillido” sobrenatural saludó a la sonda espacial Voyager I ‘, que ya se convirtió en el primer objeto artificial para entrar en el espacio interestelar.
A curioso “aullido”, fue detectado por los instrumentos de la sonda, con 36 años de edad, sonda, que ha viajado 12 billones millas de distancia de nuestro sol.
El sonido fue recibido de regreso por los científicos en la Tierra, más allá del alcance de la ondas de radio, y tardó unas 17 horas para llegar hasta nosotros. El sitio de ciencia i09 describió los sonidos como “espeluznantes” y “fantasmales”.
La NASA anunció esta semana que la pequeña sonda finalmente ha salido de la “burbuja solar”, un momento histórico que marca nuestra entrada como especie en el espacio interestelar.
Los “aullidos” y ” gritos “detectados por los instrumentos de la Voyager 1 — en realidad son ondas de plasma en el espacio— son la prueba de ello.
Las ondas de plasma son inaudibles en el espacio, pero “estas frecuencias están dentro del rango escuchado por el oído humano”, dice la NASA. “La banda sonora reproduce la amplitud y la frecuencia de las ondas de plasma tal como “escucha” el Voyager 1. Las olas detectados por las antenas del instrumento simplemente se amplifican y reproducen a través de un altavoz”.
El aumento de los tonos de los “gritos” de espacio permitió a los científicos se darse cuenta de que la Voyager entró por primera vez en el “plasma interestelar”, el gas ionizado entre las estrellas, en agosto de 2012.
“Esta conclusión es factible desde el instrumento de ondas de plasma de la nave espacial”, dijo Ed Stone, científico del proyecto Voyager en el Instituto de Tecnología de California, Pasadena. “La sonda de 36 años, ahora está navegando por aguas inexploradas de un nuevo mar cósmico y les ha enviado a nosotros para el viaje.”
“Ahora que tenemos nuevos datos clave, creemos que este es salto histórico de la humanidad en el espacio interestelar. El equipo Voyager necesitaba tiempo para analizar las observaciones y darles sentido Pero ahora podemos responder a la pregunta que todos hemos estado pidiendo. –”¿Ya llegamos?” “Sí, lo hicimos”.
El descubrimiento de los sonidos extraños -y el hecho de que la Voyager había entrado en el espacio interestelar, fue posible documentarlo gracias a una erupción en el Sol, el cual envía una ráfaga de “viento solar” para la pequeña nave.
“El 9 de abril, instrumento de ondas de plasma del Voyager 1 detectó el movimiento”, dice la NASA. “El paso de las oscilaciones ayudó a los científicos a determinar la densidad del plasma. Las oscilaciones particulares significaban que la nave estaba bañada en plasma más de 40 veces más denso que lo que habían encontrado en la capa externa de la heliosfera. Una densidad de este tipo es de esperarse en el espacio interestelar”.
La sonda espacial fue lanzada en 1977 y ha viajado millones de kilómetros a través de nuestro Sistema Solar. Ahora está tan lejos de la Tierra que sus señales de radio tienen 17 horas para llegar.
Se espera que el Voyager siga transmitiendo hasta 2020.
Fuente: Yahoo News
