El presidente Enrique Peña Nieto confirmó que a partir de 2016 habrá un rediseño integral del presupuesto que tendrá base cero, con el objetivo de emprender una reingeniería en el gobierno, a fin de ajustar y cambiar políticas públicas que ya no corresponden a la realidad del país.
Al clausurar la 78 Convención Bancaria en Acapulco, Guerrero, Peña Nieto sostuvo que la coyuntura económica internacional representa para el gobierno un reto que se enfrenta con oportunidad y plena responsabilidad.
El diseño presupuestal de 2016 irá acompañado de una evolución de la administración pública, destacó el mandatario, y agregó que ha instruido a todo su gabinete que analice a profundidad sus dependencias, a fin de evitar duplicidades y hallar áreas de oportunidad, con el objetivo de contar con un gobierno más eficiente y capaz de hacer más con menos.
El difícil entorno internacional representa retos, pero también oportunidades para México y por ello anunció que el presupuesto de 2016 tendrá una revisión integral para que deje de ser simplemente diseñado de manera inercial con base en el presupuesto del año anterior.
Adelantó que su gobierno se comportará de manera responsable para romper inercias y paradigmas y responder de manera moderna, eficiente y demostrar que es capaz de hacer más con menos.
Ante los banqueros del país, adelantó que esta es una ruta consistente, congruente e impostergable para el desarrollo y la modernidad del país, que responde al objetivo central del gobierno de llevar la prosperidad a todos los mexicanos.
El presidente Peña consideró alcanzable la meta que se ha impuesto el sector bancario nacional en el sentido de llegar a que el financiamiento de la banca represente 40 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el año 2018.
Se trata de una meta realista porque el nivel de crédito en otras economías equivale a 50 por ciento del PIB y en México queremos que haya más mexicanos con acceso a créditos para comprar casa, automóvil o bien establecer o ampliar sus negocios con base en la estabilidad macroeconómica que el gobierno está empeñado en cuidar.
El presidente Peña insistió en que la banca de desarrollo ha estado trabajando para aumentar el nivel de crédito a pequeñas y medianas empresas, a jóvenes y al campo, precisamente para darle mayores oportunidades a un mayor número de mexicanos.
Además, aseguró que la reforma financiera avanza en la dirección correcta y prueba de ello es que entre el año 2012 y 2014 el ahorro interno pasó de 55.8 por ciento a 61.9 por ciento del PIB, mientras que el financiamiento privado llegó a 29.2 por ciento.
En su discurso ante los banqueros, el presidente Peña aprovechó para felicitar al gobernador del Banco de México, Agustín Carstens Carstens, por haber sido nombrado presidente del Consejo Monetario del Fondo Monetario Internacional (FMI), lo cual calificó de “un gran orgullo para México saber que uno de sus hijos ha sido distinguido con esta responsabilidad”.
Asimismo y luego que el presidente de la Asociación Mexicana de Bancos, Luis Robles Miaja, recordó que en mayo de 2012, el entonces candidato presidencial, Enrique Peña Nieto, se comprometió a impulsar varias reformas estructurales, el ahora mandatario señaló que su gobierno ha actuado en congruencia con esos compromisos.
Destacó que la reforma financiera partió de dos premisas relacionadas con la banca mexicana. Una de ellas es que estas instituciones cuentan con la solidez para financiar el desarrollo del país y la segunda es que estaban actuando por debajo de su potencial.
Por ello, se promovió la reforma financiera con el objetivo de acercar más créditos y más baratos a la población, para lo cual fue necesario hacer modificaciones a 34 leyes en las que los legisladores, reconoció, hicieron al menos 500 modificaciones para hacerlas más eficientes, por lo cual reiteró su reconocimiento a los legisladores “por ser parte del cambio estructural”.
El presidente Peña Nieto aseguró que la reforma financiera ya ofrece beneficios completos a la población, pues los bancos prestan más a más sectores y con menores costos, si bien es importante que el gobierno ha mantenido y mantendrá un esquema de finanzas públicas sanas.
Por ello, ratificó que su gobierno realizará en 2016 el rediseño integral del presupuesto federal y que en este año se hizo un ajuste preventivo en las finanzas públicas para optimizar el gasto y hacer al gobierno más eficiente sin recurrir al crédito ni aumentar los impuestos.
“Si el país se está transformando y nos hemos decidido a avanzar, el gobierno también se debe transformar y por ello todas las dependencias tienen la instrucción de realizar un análisis profundo para evitar duplicidades y hallar oportunidades de ser más eficientes para romper inercias y paradigmas”, indicó.
Es necesario revisar las políticas y propuestas que ya no respondan a las necesidades actuales y futuras, y plantear otras en su lugar que sí respondan a las necesidades bajo el criterio de un gobierno eficiente y transparente que en la coyuntura de los actuales bajos precios del petróleo permitan responder de manera eficaz a las necesidades de la población.
Peña Nieto insistió en que su gobierno ha sido congruente con lo que planteó cuando él mismo era candidato a la Presidencia de la República y con respecto a la disciplina en el gasto público que en este año ha sido reducido de manera preventiva frente al escenario económico mundial adverso.
Fuente: Notimex
