Ricardo Monreal, líder de Morena en el Senado de la República, cuestionó a Carlos Urzúa por haber aceptado el cargo de secretario de Hacienda en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Ahora, Carlos Urzúa advierte desacuerdos con #AMLO en programas clave, y con Alfonso Romo, a quien descalifica por creencias religiosas. Si los programas fueron compromisos de campaña, ¿por qué aceptó el cargo? ¿Por qué demoler la confianza? ¿Por qué situarse en el bando opuesto?”, se lee en el tuit de Monreal.
“El conflicto de interés, Alfonso Romo”, revela Carlos Urzúa a Proceso
Monreal hace referencia a la entrevista del exsecretario de Hacienda publicada este domingo en Proceso, en donde advierte una serie de desacuerdos con proyectos como la refinería de Dos Bocas, y diferencias con Alfonso Romo y Manuel Bartlett.
El legislador condenó que el ex funcionario actúe sin sensibilidad ni agradecimiento a la confianza que le dio el Presidente Andrés Manuel López Obrador al incorporarlo a su equipo.
Ahora, Carlos Urzúa advierte desacuerdos con #AMLO en programas clave, y con Alfonso Romo, a quien descalifica por creencias religiosas. Si los programas fueron compromisos de campaña, ¿por qué aceptó el cargo? ¿Por qué demoler la confianza? ¿Por qué situarse en el bando opuesto?
— Ricardo Monreal A. (@RicardoMonrealA) July 14, 2019
El político zacatecano sostuvo que Urzúa nunca debió haber aceptado siquiera la nominación para ser Secretario de Estado si no estaba de acuerdo con los proyectos clave del Gobierno de López Obrador como la refinería de Dos Bocas y el Aeropuerto de Santa Lucía.
“No debió haber aceptado ni la nominación a la Secretaría de Hacienda. Llevo 40 años haciendo política y es la primera vez que veo una actitud tan arrogante, tan sobrada, con tanta soberbia. ¿A qué intereses sirve ahora (Urzúa)? En todas partes, donde hay adversarios del Gobierno, ahora es el héroe”, reprochó.
El presidente de la Junta de Coordinación Política en la Cámara alta condenó además que el ex funcionario utilice a Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, como “un chivo expiatorio” para justificar su salida.
“Acusar a Romo es lo más cómodo. Si Romo intervino, como dijo, debió renunciar cuando se nombró a los titulares de Nafinsa o del SAT, hubiera sido mucho menos dañino y una actitud de más cortesía política, sensibilidad humana y agradecimiento con el presidente, que le dio toda su confianza, que le dio su mano”, expresó.
Fuente: Apro/ Reforma