El Departamento de Estado de EE.UU. lanza una campaña en Twitter bajo el ‘hashtag’ #UnitedForUkraine (“unidos por Ucrania”), con la que llama a la gente a “ayudar al país”.
Desde que estallaron las protestas en Kiev, un grupo de funcionarios estadounidenses han viajado en repetidas ocasiones a Kiev para animar a los manifestantes antigubernamentales.
Además, la subsecretaria de Estado estadounidense, Victoria Nuland, que repartió pan en la Plaza de la Independencia, discutió con el embajador de EE.UU. en Ucrania, Geoffrey Pyatt, quién debía y quién no debía estar en el próximo Gobierno de Ucrania, algo que prueba el papel principal que jugó Washington en la revuelta ucraniana.
Tras la revolución, en febrero el nuevo Gobierno de Ucrania declaró en bancarrota al país y anunció que en los próximos dos años espera recibir ayuda financiera internacional por valor de unos 35.000 millones de dólares.
A su vez, las autoridades estadounidenses han asignado una asistencia de 25.000 raciones de comestible al Ejército ucraniano, la prestación directa de asistencia a Kiev por un montante de 150 millones de dólares, una garantía de préstamo a ese país de hasta 1.000 millones de dólares, aprobada por el Congreso esta semana e incluso un envío de ‘hashtags’.
Para impulsar el ‘hashtag’ #UnitedForUkraine, altos funcionarios estadounidenses han publicado sus propias fotos, entre las cuales destaca el ‘selfie’ de Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado de EE UU, que sostiene en sus manos un cartel con la etiqueta “Unidos por Ucrania”.
To echo @BarackObama today-proud to stand #UnitedForUkraine World should stand together with one voicepic.twitter.com/VeMt578UdY
— Jen Psaki (@statedeptspox) March 26, 2014
Otros altos oficiales del Departamento, incluidos el secretario de Estado John Kerry y la viceportavoz Marie Harf, siguieron el ‘tuit’.
medio social ya ayudó una vez al presidente estadounidense Barak Obama en su campaña electoral, pero ¿tendrá éxito este tipo de acciones en los asuntos exteriores? “Los ucranianos se han visto frustrados cuatro meses por la lenta respuesta y la falta de apoyo de EE.UU. y la Unión Europea”, comenta Christopher Miller, editor de ‘Kyiv Post’.
Las críticas del truco del Estado proceden en gran parte de EE.UU. Así, la foto de Jen Psaki sonriente y dando el visto bueno con el dedo fue criticada y tomada por embarazosa en los medios, blogs y tuits americanos, los cuales la determinaron como “un ‘selfie’ de apoyo”, según el periódico ‘New York Post’.
Fuente: RT