El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha reiterado este miércoles que recurrirá a sus poderes ejecutivos para declarar la “emergencia nacional” en la frontera, si demócratas y republicanos no consiguen llegar a un acuerdo de gasto que incluya la construcción del polémico muro.
De hecho, Trump abandonó reunión con líderes demócratas del Congreso para negociar muro y reapertura de Gobierno y aseguró que fue una pérdida de tiempo.
De acuerdo con el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, Trump sólo se levantó y dejó la sala, según el diario The Wall Street Journal.
“Realmente creo que demócratas y republicanos están trabajando y creo que puede pasar algo, eso espero. Si no es así, buscaremos una forma distinta”, ha dicho en declaraciones a la prensa desde la Casa Blanca durante la firma de una ley, según informa CNN.
A preguntas de los periodistas, el magnate neoyorquino ha sido más claro: “Declararé la emergencia nacional si no puedo llegar a un acuerdo con gente poco razonable”. “Creo que podemos trabajar en un acuerdo pero, si no seguimos por esta vía, tendré toda la autoridad para declarar la emergencia nacional, si quiero”, ha añadido.
Trump ha defendido que “el país está viviendo un momento realmente bueno”, gracias a su gestión presidencial, “excepto por la frontera”.
“La frontera es un gran problema, un problema muy peligroso (…) Tenemos que encargarnos de la frontera”, ha insistido.
El jefe de Estado dio el martes su primer discurso televisado desde la Casa Blanca para culpar a los demócratas del cierre parcial del Gobierno por su negativa a liberar en el Congreso los 5 mil millones de dólares que se necesitan para construir el muro, pero no habló sobre la posibilidad de declarar la “emergencia nacional”.
Trump argumentó que el muro es necesario porque “todos los estadounidenses se ven afectados por la descontrolada migración ilegal”. Según dijo, “reduce los empleos y los salarios”. “No tenemos espacio para retenerles y no tenemos forma de trasladarles de inmediato a su país”, afirmó.
La administración pública funciona a medio gas desde el pasado 22 de diciembre porque el Congreso, tanto los demócratas como algunos republicanos, se ha negado a financiar el polémico muro, haciendo naufragar así el acuerdo sobre el nuevo techo de gasto.
Trump amenazó la semana pasada a los líderes de ambos partidos en el Congreso con mantener cerrado el Gobierno “meses o años” hasta que los críticos cedan, aunque planteó como alternativa que podría usar sus poderes ejecutivos para declarar la “emergencia nacional” en la frontera.
Fuente: Europa Press
