Un tiburón atacó y mató a un salvavidas en la playa de Nuevo Altata, Sinaloa. El rescatista se introdujo al mar para liberar un chinchorro, cuando fue alcanzado por un depredador marino que le despedazó pierna, pantorrilla y glúteo izquierdo. La zona fue cerrada a los bañistas.
Francisco Cárdenas García, de 32 años, de oficio “salvavidas”, fue atacado por un tiburón alrededor de las 11:40 horas del miércoles 21 de noviembre en la zona de playa de Nuevo Altata, tras cortar un chinchorro que se enredó con el golpeteo del oleaje, publica Noroeste.
“Desgarrrado y moribundo, recibió el auxilio de sus compañeros salvavidas, pero la pérdida de sangre durante el trasladado al hospital del IMSS en Navolato, no le dio tregua”, cita el periódico. Para los cuerpos de socorro y pescadores de la zona, se trata de un ataque inusual.
El reporte médico establece que Francisco sufrió heridas de mordedura de escualo en la pierna, pantorrilla y glúteo izquierdos.
“Considero que como hay lobos marinos en la zona, éstos atraen depredadores más grandes, como puede ser un tiburón blanco, un mako o una cornuda”, explica Juan Acereto, presidente de la Asociación de Pesca Deportiva de Sinaloa.
Con experiencia en alta mar, Acereto dijo a Noroeste que la especie atancante pudo ser un tiburón de entre 50 y 80 kilos, por el tamaño de boca de 15 centímetros de la mordida, y de 2.5 metros de largo.
“La realidad que es un hecho aislado, y en nada tiene que ver para la gente que nada donde revienta la ola y la playa. Además, esto sucedió en mar abierto, y no en la bahía”, expresa.
Propone hacer una búsqueda con un palangre con carnada(anzuelo), para capturar a cualquier tiburón que se haya colado hasta la playa, y que pueda representar un peligro.
Tras conocer el ataque en aguas marinas, la Coordinación Municipal de Protección Civil de Navolato restringió el acceso a los bañistas por los próximos tres días, de acuerdo con Noroeste.
“En medidas preventivas, se restringe la entrada a la playa, ya platicamos con el personal de seguridad de Isla Cortés, le solicité al Estado el yate para hacer un recorrido por tres días, mañana, tarde y noche, para ver qué indicios o algún indicador que nos pueda dar qué está pasando por ahí”, difundió.
Para Leobardo Plomosa, profesor de la Facultad de Ciencias del Mar citado por Noroeste, en México y en Sinaloa existen pocos antecedentes de ataques de tiburón contra humanos, por lo que es muy raro el caso que se presentó en Nueva Altata.
“En México hay pocos antecedentes de ataques de tiburón, en Sinaloa las especies que hay es carcharhinus leucas (tiburón prieto) y otro que le llaman cornuda, parecida al pez martillo, que regularmente son migratorios”, explica.
