“Televisa es una empresa de poder. Que nació con el sistema político mexicano, que cobijó el sistema y acabó carcomiendo al sistema. Es decir, tuvo un poder por encima del PRI y la Presidencia de la República en los años de Felipe Calderón y en el impulso de Enrique Peña Nieto”, afirma el periodista Jenaro Villamil, autor de “La rebelión de las audiencias”.
Por Juan Carlos Cruz Vargas
El cambio de paradigma en la comunicación ha llegado. La era de los grandes medios audiovisuales ya es rebasada por el nacimiento del lenguaje empleado en el mundo digital, en las redes sociales.
Así lo deja ver el periodista Jenaro Villamil en su libro “La rebelión de las audiencias: De la televisión a la era del trending topic y el like”, editado por Grijalbo.
No sólo eso, pues Villamil, quien escribe en las páginas de la revista Proceso, “aterriza” el nuevo modelo en México, al asegurar que el poder de la gran televisora del país en los últimos tiempos ha llegado a su final, junto con el sistema político que la ha mantenido a flote en las últimas décadas.
“La única transición que existe es la analógica a lo digital y, si está ocurriendo, que esto ayude a la democracia o transición del país, está por verse, aunque lo que sí está haciendo es carcomiendo un ejercicio autoritario que es el que representa Televisa”, sentenció.
En la terraza del Museo del Estanquillo, donde fue presentado el libro que consta de cuatro capítulos distribuidos en 191 páginas, Villamil puso el dedo en la llaga:
“Televisa no es una empresa común y corriente como pudo haber sido cualquier otra cadena de televisión comercial. Televisa es una empresa de poder. Que nació con el sistema político mexicano, que cobijó el sistema y acabó carcomiendo al sistema. Es decir, tuvo un poder por encima del PRI y la Presidencia de la República en los años de Felipe Calderón y en el impulso de Enrique Peña Nieto”.
Agregó: “¿Qué le está sucediendo? Le está sucediendo en que a medida que el sistema se va cayendo, Televisa, como poder político y económico, se está cayendo. Como empresa está en crisis también”.
Eso sí, en esta “rebelión de las audiencias” el autor de origen yucateco dejó claro que la televisión en México no va a morir. Sin embargo, acotó que sobrevivirán aquellos medios que sea fieles a sus audiencias en términos de credibilidad.
“Los medios que sobrevivan van a ser los que tengan audiencias, los que escriban y transmitan para su audiencia, los que no traicionen la credibilidad, la confianza, la calidad que reclaman sus audiencias”, soltó el periodista y académico especializado en temas de comunicación.
La noche lluviosa transcurrió en la terraza del Museo, donde se exhibe la obra del escritor Carlos Monsiváis y donde se congregaron decenas de jóvenes para escuchar las definiciones del autor del libro. El chubasco arreció igual que la crítica de Villamil a los medios escritos. Lanzó los dardos uno a uno.
“En ese sentido, los periódicos que sigan escribiendo y publicando, no voy a decir el nombre, pero todos se van a acordar de este periódico muy de izquierda que día con día pone en las ocho columnas a Peña Nieto, si hacen eso, a lo mejor Peña los rescata financieramente, pero es una vergüenza, porque está traicionado a sus audiencias, y por ello están desertando sus audiencias”, fustigó.
Jenaro Villamil aseguró que la tesis del libro se contrapone al teórico Marshall Mc Luhan, ya que el también filósofo decía “que el medio es lo importante para que el mensaje llegue”.
Mientras que, en su nuevo trabajo, la tesis de Villamil es que “existan audiencias para que el mensaje llegue”.
Con esa conclusión, la obra de Jenaro Villamil desmenuza las nuevas formas de comunicación digital, en cómo la juventud ha modificado sus hábitos de lectura debido a las nuevas tecnologías.
Asimismo, no dejó pasar la oportunidad de contar a su joven auditorio la crisis de inseguridad que viven los periodistas en el país, entre asesinatos y amenazas de muerte. Además de que el mercado laboral en los medios se ha deteriorado en cuestiones salariales.
Fuente: Proceso