Los científicos Jacques Dubochet, Joachim Frank y Richard Henderson fueron galardonados este miércoles con el Premio Nobel de Química 2017 por desarrollar la criomicroscopía de electrones para la determinación estructural en alta resolución de biomoléculas en soluciones, anunció la Real Academia Sueca de las Ciencias.
El científico suizo Jacques Dubochet, el estadounidense Joachim Frank y el británico Richard Henderson fueron galardonados este miércoles con el Premio Nobel de Química por la criomicroscopía electrónica, un método revolucionario de observación de las moléculas en 3D.
“El premio de este año recompensa un refrescante método de producir imágenes de moléculas vivas” congeladas en movimiento, anunció Göran Hansson, secretario general de la Academia Real de Ciencias, que otorga el galardón.
Gracias a sus hallazgos, “los científicos pueden ahora producir (…) estructuras tridimensionales de biomoléculas”, argumentó el jurado Nobel.
La criomicroscopía permite estudiar muestras biológicas (virus, proteínas) sin alterar sus propiedades, puesto que evita los colorantes o los haces de electrones desprendidos por los rayos X.
La microscopia electrónica convencional deshidrata las muestras (muchas veces constituidas por una gran cantidad de agua), de modo que las altera. También las altera el uso de colorantes o de sales empleados para mejorar la resolución de la imagen.
Hasta los años 1980, cuando Jacques Dubochet -ahora de 75 años- y su equipo inventaron la criomicroscopía electrónica, se congelaba la muestra para conservarla en su estado original.
La tecnología moderna permite reconstruir la muestra biológica -por ejemplo de un virus o una bacteria- en tres dimensiones. “Una imagen es una llave para la comprensión”, explica la Academia.
En 1990, Henderson, actualmente de 72 años, fue el primero en producir una imagen tridimensional (3D) en resolución atómica de una proteína. Joachim Frank, de 77, perfeccionó la técnica y la simplificó.
“Cuando los investigadores empezaron a sospechar que el virus del Zika era responsable de las graves anomalías en los bebes en Brasil (en 2015), recurrieron a la crio-EM (criomicroscopia electrónica) para visualizar el virus”, recordó el comité Nobel.
En 2016, el Nobel de Química fue para el francés Jean-Pierre Sauvage, el británico Fraser Stoddart y el holandés Bernard Feringa, creadores de las minúsculas “máquinas moleculares” que prefiguran los nanorobots del futuro.
(Con información de AFP)