Los ingresos por remesas alcanzaron en febrero de 2023 un monto sin precedente para un periodo similar. Sumaron 4 mil 348 millones de dólares, lo que refleja un incremento de 11.2 por ciento respecto al mismo mes del año pasado.
De acuerdo con los registros del Banco de México, con ello se acumulan 34 meses consecutivos con crecimiento, iniciado desde mayo de 2020; y, en general, el flujo de remesas de los pasados 12 meses se ubicó en 59 mil 434.71 millones de dólares, también un saldo histórico.
El organismo detalló que, en el acumulado del primer bimestre del año, el valor de los ingresos por remesas alcanzó 8 mil 755 millones de dólares, lo que refleja un incremento de 11.8 por ciento comparado a 2022.
El área de estudios económicos de BBVA México destacó que tras el inicio de la pandemia, la tasa de desempleo en Estados Unidos ha ido cayendo rápidamente: en febrero de 2023 se ubicó en 3.6 por ciento, ya en los niveles prepandemia, con una mayor recuperación entre la población que se autoidentifica como hispana o latina.
Datos de la oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos exhiben que hasta febrero habían 29.8 millones de hispanos o latinos con trabajo en ese país, 1.3 millones más que antes de la pandemia, lo que refleja el “progreso en la condición laboral de la población migrante mexicana, tanto con residencia legal como no documentada”, que es la principal emisora de remesas hacia esa nación.
Al realizar un análisis sobre el incremento de los flujos de transferencias familiares hacia México, los economistas de BBVA México tildaron de “muy exagerados los argumentos que relacionan el fuerte crecimiento de las remesas observado en los tres años anteriores con su uso para el envío de dinero de actividades ilícitas”.