El primer ministro tiene más posibilidades de atraer socios para sumar la mayoría
La incertidumbre se prolonga en Israel. Al cierre de los colegios electorales, los sondeos apuntan a un empate técnico entre el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y el líder laborista, Isaac Herzog, con 27 escaños. La mayoría necesaria para formar Gobierno es de 61 escaños. Ambos tendrían dificultades para formar un Gabinete. Los partidos centristas y los religiosos serán los que otorguen la victoria a uno u otro si los resultados confirman los pronósticos de los tres canales de televisión israelíes.
La media de los sondeos del canal 10, el canal 2 y el canal 1 indica que el Likud de Netanyahu ha obtenido 27-28 escaños, Unión Sionista (de Herzog), 27; Lista Conjunta árabe-judía, 12-13; Yesh Atid (centrado en cuestiones sociales), 11-12; el Hogar Judío, el partido de los colonos liderado por Naftali Bennet, (8-9); Los religiosos Shas (7) y Unidad de la Torá y el Judaismo (6), Kulanu, del exministro Kahlon (9-10) el ultraizquierdista Meretz (5) y el ultraderechista Israel Nuestra Casa del ex ministro Liberman (5). Nunca un partido ha logrado mayoría absoluta en las elecciones celebradas desde la fundación de Estado, en 1948.
El presidente israelí, Reuven Rivlin, ha asegurado que trabajará por un Gobierno de unidad. “Estoy convencido de que solo un Gobierno de unidad puede prevenir la rápida desintegración de la democracia israelí y nuevas elecciones en breve”, ha declarado Rivlin según informa el diario Haaretz.
Los sondeos a pie de urna coinciden básicamente con los realizados a lo largo de la campaña electoral salvo en la significativa caída registrada por Casa Judía, que ha perdido 3-4 escaños, respecto a lo esperado, que, según los analistas, ha ido a engrosar el voto del Likud de Netanyahu. Los dos partidos en cabeza también han obtenido, según los sondeos, más escaños de los pronosticados en las últimas semanas.
Desde el amanecer los centros de votación estaban rodeados de militantes de los partidos que hacen campaña hasta en la misma jornada electoral, convertida en un plebiscito sobre la continuidad del primer ministro conservador, Benjamín Netanyahu. Los cerca de seis millones de electores convocados a estas legislativas anticipadas decidirán sobre si revalidan en un cuarto mandato al líder del Likud o se inclinan por la alternancia en el poder, encarnada por el laborista Isaac Herzog, que puede convertirse en el primer gobernante de su partido tras 14 años de hegemonía del centroderecha.
Hasta las ocho de la tarde (una hora menos en la España peninsular) ha votado el 65,7% del censo, según ha informado la Comisión Central Electoral, casi dos puntos por encima de la participación a la misma hora en los comicios de 2013 (63,9%).
Fuente: El País