Una vez al año, una alineación astronómica anuncia la llegada de este cambio estacional que se celebra en todo el mundo y está rodeado de mitos.
Este martes 21 de diciembre se dará el solsticio de invierno, lo cual significa que será el día más corto y la noche más larga del 2021, lo cual también representa el comienzo de la estación más fría pero más llena de festividades del año.
Según el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) el solsticio de invierno de este 2021 ocurrirá este martes 21 de diciembre a las 15:59 Tiempo Universal (UTC), es decir, a las 09:59 horas, tiempo del centro de México.
El señor Sol saldrá del horizonte por ahí de las 07:06 horas de la mañana en México, pero dirá adiós a las 18:03 horas, por lo que solo habrá luz casi 11 horas.
Así es, después de las 18:00 horas comenzará la noche más larga de este año y terminará hasta el miércoles 22 de diciembre a las 07:06 horas, cuando el señor Sol otra vez aparezca, por lo que habrá poco más de 13 horas de oscuridad.
Durante milenios, culturas de todo el mundo han ideado formas de celebrar y venerar estos fenómenos celestes, como construyendo estructuras que se alinean con el solsticio o celebrando de fiestas en su honor.
Aunque aún se desconoce el propósito de la enigmática estructura inglesa de Stonehenge, este monumento de 5000 años de antigüedad tiene una relación especial con los solsticios. En el solsticio de verano, la Heel Stone del complejo, que se encuentra fuera del círculo principal de Stonehenge, se alinea con el Sol naciente.
En Egipto, las pirámides de Guiza también parecen alinearse con el Sol. Cuando se observa desde la Esfinge, el Sol se pone entre las pirámides de Keops y Kefrén durante el solsticio de verano, aunque no está claro cómo los antiguos egipcios las orientaron de esta forma.
Muchas culturas han descubierto formas únicas de celebrar el solsticio de verano. La festividad escandinava tradicional del Midsommar le da la bienvenida con bailes alrededor de un poste, bebida y romance. Durante la fiesta eslava de Iván Kupala, se llevan coronas florales y se baila alrededor de las hogueras, mientras que los más valientes saltan sobre el fuego para conseguir buena suerte y salud. En una tradición más moderna, los habitantes de Fairbanks, Alaska, marcan la llegada del solsticio de verano con un partido de béisbol nocturno para celebrar el hecho de que pueden tener hasta 22,5 horas de luz en verano. El Midnight Sun Game se ha jugado 115 veces, desde 1906.
El solsticio de invierno también se celebra de varias formas. El 24 de junio, coincidiendo con el solsticio de invierno del hemisferio sur, el Imperio incaico celebraba Inti Raymi, un festival que honraba al poderoso dios sol Inti de la religión incaica y marcaba el año nuevo incaico. Esta fiesta sigue celebrándose en los Andes y, desde 1944, se ha organizado una reconstrucción del Inti Raymi en Cuzco, Perú, a pocos kilómetros de la cuna del Imperio incaico.
Los antiguos romanos celebraban el solsticio de invierno con Saturnalia, un festival de siete días en el que se intercambiaban regalos, se decoraban las casas con plantas y se encendían velas. Y los iraníes celebran Yalda en diciembre. La fiesta —una piedra angular desde que el zoroastrismo se convirtió en la religión dominante de Irán— conmemora el nacimiento de Mitra, la antigua diosa persa de la luz.
Fuente: NatGeo/ Sopitas