El movimiento #YoSoy132, surgido de un acto de repudio a Enrique Peña Nieto en la Universidad Iberoamericana, festeja este sábado su primer aniversario con diversas actividades en la Estela de Luz. Sigue aquí la celebración EN VIVO cortesía de NicpOps.
En el lugar será instalado un mural de memoria colectiva, se proyectarán avances de los documentales #YoSoy132 y Pueblo Grande, y habrá presentaciones de grupos musicales.
El Mastuerzo (Botellita de Jérez), los Jijos del Maíz, Los Coronet y una Banda Sorpresa acompañarán en el festejo a los jóvenes activistas, quienes con frescura, indignación, inteligencia y alegría irrumpieron en las elecciones del 2012.
No faltarán los Jaraneros132 ni, por supuesto, Cumbia132, que marcaron el ritmo para hacer de marchas y mítines fiestas colectivas, donde la denuncia adquiere tono de canción y la protesta, el movimiento, se expresa en su forma más perfecta, el baile.
La génesis
El inicio fue un 11 de mayo de 2012. En medios se rumoraba que un grupo de jóvenes impediría la entrada del entonces candidato priísta Enrique Peña Nieto a la Universidad Iberoamericana. Periodistas a la expectativa se apostaron en la entrada del recinto académico en número tal que opacaban a los jóvenes manifestantes, quienes, unos a favor y otros en contra, esperaban con carteles al aspirante presidencial.
La entrada del político mexiquense pasó desapercibida. Ya estaba en el auditorio cuando se empezó a escuchar el grito de “¡Fuera, Peña!”, “¡Fuera, Peña”. El video del repudio se difundió de inmediato con versiones de que el candidato había tenido que refugiarse en el baño de la escuela.
En su reacción de “control de daños”, Pedro Joaquín Coldwell, integrante del equipo de campaña del aspirante priísta, y a la postre secretario de Energía, dio una entrevista en la cual aseguró que los gritos de repudio fueron “obra de estudiantes que no estudiaban” ni pertenecían la Ibero, sino de “porros de izquierda…”.
En el contexto mundial, se vivían movimientos de indignación, acampadas en España, Rusia, Alemania y Estados Unidos contra la crisis, precedidos de las protestas en países árabes, en especial en Egipto, que obligaron a la salida de Hosni Mubarak. Manifestaciones que dejaban en el aire la pregunta: ¿en México cuándo? ¿quienes?
Los indignados
Los señalamientos de Coldwell de que no eran más que “infiltrados” indignaron a los jóvenes que se manifestaron contra Peña Nieto ese 11 de mayo. En respuesta, subieron un video a Youtube en el cual se presentaban, uno a uno, con credencial de la Universidad Iberoamericana en mano, para demostrar que eran estudiantes, de la Ibero, y que estaban contra el aspirante priísta. En total aparecieron a cuadro 131 jóvenes.
La reacción fue impresionante, sólo concebible en la era digital y las redes sociales. En apoyo y secundando a sus valientes compañeros, alguien dijo “Yo soy el 132”, para significar que también estaba contra las aspiraciones presidenciales del candidato tricolor.
Luego ya no importó si se participó en la protesta original o no, si se era alumno de la Ibero o cualquier otra universidad, si se era estudiante siquiera. Como unaola en un estadio, así de festiva se expandió la autoproclamación como “YoSoy132”, a cuya denominación se le agrega el símbolo de número porque el nombre vino de un hastag en redes sociales, un movimiento que se apropia de los signos y lenguaje de su época.
En ese ambiente, al video “131 alumnos de la Ibero responden“, siguió en Twitter el hashtag #Marchayosoy132, a través del cual se convocó a una marcha en demanda de una cobertura equilibrada en medios de comunicación a las campañas electorales.
El 18 de mayo, los jóvenes protestaron frente a las instalaciones de la televisora Televisa, a la que acusaban de favorecer al priísta.
Al día siguiente y convocada con menos de 24 horas de anticipación, el movimiento tuvo una réplica de mayor grado con una Marcha anti-Peña Nieto en la que participaron miles de personas. Según los organizadores asistieron 46 mil en el DF, y miles más en diversas ciudades del país.
La movilización era tan sorpresiva y espontánea que ni los originales 132 sabían el rumbo que tomarían, cómo canalizar el descontento. El 30 de mayo, se realizó la primera asamblea en Ciudad Universitaria, donde se acordaron más protestas y acciones.
A veces se les acusaba de estar manipulados por López Obrador y de ser un grupo de ataque contra Peña, lo cual negaban algunos de sus integrantes, mientras otros pugnaban por abanderar esas causas.
Sin embargo, en sus pronunciamientos oficiales, #YoSoy132 fue más allá de lo electoral: apostó por la democratización de la prensa, y demandó tanto al gobierno como a los medios de comunicación hacer válido el derecho a la información y dar mayor cobertura a las elecciones.
Los logros
Los jóvenes solicitaron a la Secretaría de Gobernación que ejerciera su poder sobre los concesionarios de los medios a favor de la ciudadanía y transmitiera los debates entre los candidatos presidenciales a través de cadena nacional, lo cual no se consiguió.
Sin embargo, con sus manifestaciones los jóvenes lograron lo hasta entonces inimaginable, que Televisa cambiara su programación. La empresa de Emilio Azcárraga transmitió el segundo debate presidencial a través de Canal 2, su canal estrella y en horario estelar.
La voz de #YoSoy132 llegó a tomar tanto peso político y social que tras convocar a un debate presidencial, tres de los cuatro candidatos acudieron: Josefina Vázquez Mota (PAN), Gabriel Quadri (Panal) y Andrés Manuel López Obrador (PRD). Sólo Enrique Peña Nieto rechazó la invitación.
El candidato al cual cual repudiaron ese 11 de mayo en la Ibero resultó vencedor de las elecciones, y tras algunas protestas postelectorales, #YoSoy132 ha salido del escenario y de la atención de los medios. Sin embargo, su nacimiento y existencia son memorables, un aniversario para festejar.
Fuente: La Jornada
