El gobernador chihuahuense Javier Corral se convirtió hoy, junto con el precandidato presidencial Ricardo Anaya, en la estrella del Partido Acción Nacional (PAN) por su pleito con el gobierno de Enrique Peña Nieto, a quien le ofreció una salida a la crisis por el recorte de 700 millones de pesos: “si nos depositan se arregla el problema”.
En la primera sesión del año del Consejo Nacional del PAN, que aprobó su Plataforma Electoral, el histriónico político de Chihuahua fue ovacionado de pie por los 223 consejeros presentes –de un total de 383–, quien llegó “a la médula de la corrupción” en ese estado, como la definió el presidente nacional de ese partido, Damián Zepeda.
Durante el Consejo Nacional del PAN, los consejeros dieron su respaldo al gobernador de Chihuahua, Javier Corral. pic.twitter.com/qWaJZlEd5J
— El Heraldo de México (@elheraldo_mx) January 13, 2018
“¡Duro, duro, duro!”, le gritaron los panistas a Corral, quien poco antes de iniciar la sesión del Consejo Nacional aclaró, en entrevista, que su gobierno articula un plan en materia política, económica, social y en todos los ámbitos para que se resuelvan las dos exigencias:
“Nos tiene que depositar los recursos retenidos injustamente y tienen que solicitar la extradición de César Duarte. Y de ahí no nos vamos a mover. Y son dos cosas separadas. Si nos depositan se arregla el problema. No tenemos mayor… (sic) Si no fue por otra cosa que salimos a denunciar esto”, lanzó.
Corral advirtió que la comunicación con el gobierno de Peña está rota y que mañana domingo, en el mitin al que convocó en la plaza pública de Chihuahua, se darán a conocer las acciones que tomará su gobierno.
“Es una relación muy tensa, de hostilidad del gobierno federal, con una operación mediática embustera que ha puesto en marcha en nuestra contra”, expresó el polémico exdiputado y exsenador al referirse a las declaraciones de los funcionarios federales, incluido Peña.
–¿Hay alguna comunicación o la relación está rota?
–Ninguna.
¿Prácticamente está rota?
–Prácticamente está rota. No hay ninguna comunicación con los funcionarios. Por el contrario, vemos la serie de mentiras que han salido a decir, cómo se han todos entrampado en declaraciones absurdas, en explicaciones sin sentido. Estamos ante un hecho escandaloso verdaderamente en la vida del país.
Esta mañana en el Consejo Nacional del partido dije que esta batalla trasciende a @AccionNacional, a los partidos, al mismo @PorMexAlFrente, y que no tiene fines electorales, porque es la lucha de todo #Chihuahua por su soberanía.
Pero sí le plantea al PAN una definición. pic.twitter.com/mZlthn8072— Javier Corral Jurado (@Javier_Corral) January 13, 2018
En la sesión del Consejo Nacional del PAN, Corral ocupó la primera fila del presídium, al lado de Anaya, a quien los asistentes vitorearon y quien respaldó también a Corral: “¡Presidente, presidente, presidente!”.
Aunque nadie confirmó nada, en el PAN corre la versión de que otros gobernadores panistas o aliancistas irán por otros exgobernadores priistas implicados en corrupción, como Egidio Torre, de Tamaulipas y Roberto Sandoval, de Nayarit.
Fueron notorias las ausencias de Felipe Calderón, quien mantiene una ruda confrontación con Anaya y Zepeda, y la excandidata presidencial Josefina Vázquez Mota, quien es integrantes del CEN del PAN, pero que sigue deprimida por la derrota aplastante en el Estado de México, aunque podría reaparecer como candidata a senadora.
Ausente estuvo también el exgobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, quien declinó su aspiración presidencial ante Anaya, a cambio de que su esposa, Martha Erika Alonso, sea la candidata a gobernadora.
Uno de los operadores de Moreno Valle, Pablo Rodríguez Regordosa, dio cuenta de estas negociaciones. “Martha Erika será la candidata a gobernadora y él va a trabajar por el PAN”, dijo.
Rodríguez Regordosa reveló al reportero, además, que él declinó buscar ser candidato a senador, porque el gobernador de Puebla, Antonio Gali, pidió esa posición para su hijo, José Antonio Gali López.
Este es otro caso más de nepotismo político, como en el PAN de Veracruz, donde el gobernador Miguel Ángel Yunes impuso como candidato a sucederlo a su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez, presentes los dos en el presídium.
Fuente: Apro