El Comité de Seguridad del Senado de EE.UU. confirma que no ha encontrado ninguna evidencia de que el conteo de votos haya sido manipulado, o de que el registro de votantes fuese modificado o alterado.
El Comité de Seguridad del Senado de EE.UU. ratificó en un documento oficial que no hay indicios de que una supuesta “intervención rusa” haya afectado los resultados de las elecciones presidenciales de 2016.
El documento refrenda que el Comité está de acuerdo con la Comunidad de Inteligencia de EE.UU. al señalar que actores vinculados al Gobierno ruso estuvieron detrás de alguna actividad cibernética dirigida contra la infraestructura electoral del país. Sin embargo, admite que no ha encontrado evidencia alguna de que el conteo de votos haya sido manipulado, o de que el registro de votantes fuese modificado o alterado.
Según el documento, “el alcance total de la actividad rusacontra los estados” de la Unión “no está claro debido a las brechas en la información recopilada, pero el Comité encontró amplia evidencia para concluir que el gobierno [ruso]estaba desarrollando capacidades para socavar la confianza en nuestra infraestructura electoral”.
El Comité no sabe si esos actores, presuntamente vinculados al Gobierno ruso, intentaron explotar vulnerabilidades durante las elecciones de 2016 y posteriormente decidieron no tomar medidas, o si simplemente estaban reuniendo información y probando capacidades para un ataque futuro, se dice en el documento. “De todos modos, el Comité cree que la actividad indica una intención de ir más allá de la recolección de inteligencia tradicional”, afirma.
Rusia ha refutado repetidamente las acusaciones sobre la presunta injerencia de Moscú en las elecciones presidenciales de EE.UU. en 2016. Así, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, las calificó de argumentos sin fundamentos.
El canciller ruso también ha afirmado en una entrevista a BBC a mediados de abril, que EE.UU. quiere castigar “a todo el pueblo ruso” con sanciones por “la ‘incorrecta’ elección” de su jefe de Estado.
Fuente: RT