Más de una semana después de que Clinton se asegurara virtualmente la nominación presidencial demócrata, Sanders no ha concedido la contienda, y personas cercanas a ambas campañas dicen que un respaldo formal no es inminente.
Eso tiene nerviosos a algunos demócratas.
Los demócratas quieren que Bernie Sanders respalde públicamente a Hillary Clinton y fortalecer la unidad del partido, pero alcanzar esa integración con vistas a las elecciones de noviembre pudiera tomar tiempo.
“Mientras más pronto Bernie Sanders se sume y active a sus partidarios, más fácil será promover nuestro mensaje”, dijo el representante demócrata Tim Ryan, partidario de Clinton. “Si estamos discutiendo sobre la plataforma del partido, estamos tropezando con dólares para recoger centavos. Existe el potencial de temer una mayoría gobernante el año próximo. Para mí, eso va a generar más ganancia que un cambio en la plataforma del partido”.
Sanders ha indicado que las próximas semanas pudieran darle la mejor oportunidad de conseguir el respaldo de Clinton a varias posiciones políticas y reformas electorales que formaron las bases de su campaña insurgente. Su encuentro cara a cara en un hotel en Washington el martes por la noche fue un primer paso en el proceso, con vistas a la Convención Nacional Demócrata en Filadelfia.
A una pregunta en una conferencia de prensa el martes sobre cuándo daría su respaldo a Clinton, Sanders se limitó a decir que su batalla siempre ha sido para “transformar a los Estados Unidos. Defender a los trabajadores. Pelear por una agenda progresista que sirva las necesidades de los trabajadores y no poderosos intereses corporativos”.
Sanders iba a hablar con sus partidarios el jueves en un discurso en internet desde su base en Burlington, Vermont. Se espera que hable sobre el futuro de la “revolución política” que ha generado en el último año. No se espera que ponga fin a su campaña.
Tras la primaria final el martes en Washington DC, Clinton y Sanders tratan de armar una tregua que permita a los partidarios del senador unirse en apoyo a Clinton y asegurar que el mensaje de Sanders sobre una economía que favorece a los poderosos es llevado a la elección general y más allá.
Muchos demócratas, incluyendo algunos partidarios de Sanders, quieren un respaldo público a Clinton para presentar un frente unido contra el candidato republicano Donald Trump.
“Preferiría que suceda más temprano que tarde. Es claro que Hillary es la nominada”, dijo el representante demócrata Peter Welch sobre un respaldo de Sanders.
Welch, que la semana pasada asistió a una reunión en la casa del senador, dijo que admitir que Clinton será la nominada del partido pudiera fortalecer la posición de Sanders para negociar compromisos políticos y cambios electorales.
Sin embargo, Sanders ha dicho a menudo que él no puede simplemente con un gesto hacer que sus millones de partidarios den su apoyo a Clinton.
Además, muchos partidarios de Sanders tienen una opinión muy pobre de Clinton. La mera mención por Sanders de Clinton en actos de campaña a menudo causaba abucheos de la muchedumbre y un respaldo pronto pudiera hacerles sentir que él simplemente capituló sin recibir nada a cambio.