La Comisión Nacional del Agua (Conagua) convocó a la primera licitación relacionada con el nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México desde que se anunció el proyecto, para la supervisión de obras hidráulicas en el ex Lago de Texcoco.
La convocatoria fue publicada el lunes en Compranet y no hace alusión directa a la terminal, que será construida sobre más de 4 mil 600 hectáreas de terrenos federales en la zona que ocupó el lago. Sin embargo, todo indica que las obras que serán supervisadas forman parte de los trabajos hidráulicos para regulación y drenaje que arrancarán en octubre, valuados en 17 mil millones de pesos y anunciados por el director del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Manuel Ángel Núñez.
El proyecto de inversión del nuevo AICM detalla que se requieren túneles de drenaje profundo al sur y poniente de los terrenos federales, sustituir las lagunas de regulación actuales del Lago de Texcoco y reforzar la capacidad de conducción de ríos y canales.
Las obras que deberá supervisar la empresa ganadora durante un periodo de seis meses, descrito por la Conagua como la primera etapa de los trabajos, consistirán en la construcción de lumbreras en suelos lacustres del Valle de México, a una profundidad mínima de 12 metros, e hincado de tubería de acero y/o concreto, por el método de microtúneleo con escudo de frente.
Este tipo de obra requiere de tuneladoras como las que se han utilizado para el Túnel Emisor Oriente, el Canal Nacional y muchos otros sistemas reguladores y de drenaje. Además, la contratista supervisará “la construcción de estructuras hidráulicas a una profundidad de cuando menos 10 metros e instalación de compuertas de acero a diversa profundidad”.
El fallo del concurso será anunciado a finales de septiembre. Los términos de referencia de la licitación no entran en detalles adicionales y sólo aluden a los problemas de drenaje que enfrenta la Ciudad de México.
“El sistema hidráulico de la Ciudad es de los más extensos y complejos del mundo, dadas las características del subsuelo donde se aloja”, señala el documento. “Este hecho, combinado con la sobreexplotación del acuífero subyacente al antiguo fondo lacustre donde se asentó esta Ciudad, ha provocado en algunas zonas hundimientos diferenciales y regionales del terreno, que afecta a todo tipo de infraestructura superficial, particularmente al sistema de drenaje que se diseña y construye para funcionar por gravedad”.
La empresa supervisora deberá asignar 14 especialistas en mecánica de suelos, ingeniería hidráulica y topografía, y en tecnologías de la información, pues se deberá emplear un Sistema de Información Geográfica que permitirá a los tomadores de decisiones monitorear todo el proyecto en tiempo real por internet. Hasta ahora no se ha publicado la convocatoria para contratar a las empresas que se harán cargo directamente de las obras en cuestión.
Fuente: Reforma
