Los crudos personajes de las historietas cómicas para adultos que en los años ochenta crearon los caricaturistas tapatíos Jis y Trino, cobran vida a través de la nueva cinta de dibujos animados El Santos vs la Tetona Mendoza, “largometraje pacheco” del director Alejandro Lozano que se estrena esta semana durante el 10° Festival Internacional Cinematográfico de Morelia. Para las voces convocó a actores “fuertes y no de doblaje”, como Daniel Giménez Cacho, Regina Orozco y José María Yazpik, entre otros.
Por Columba Vértiz de la Fuente
Tras 10 años de planeación, surge el primer largometraje de animación mexicano para adolescentes y adultos, El Santos vs la Tetona Mendoza, basada en la historieta homónima de José Ignacio Solórzano (Jis) y José Trinidad Camacho (Trino), bajo la dirección de Alejandro Lozano.
El actor José María Yazpik brinda voz al Peyote Asesino, eterno rival del Santos. Destaca el proyecto fílmico de Lozano como un gran acierto:
“Me parece maravilloso que se filme un cómic con estas características, creo que nunca se había realizado para adolescentes y adultos. Es un largometraje divertido, y no intenta generar una catarsis. Le pega a quien le debe pegar por encima.”
Para “El chico Almodóvar” (Yazpik protagoniza Los amantes pasajeros, el nuevo filme del español Pedro Almodóvar aún en postproducción), fue sencillo intervenir en esta historia de caricatura:
“Cuando se trata de un cómic, la gente que lo lee le pone su propia voz, entonces no se le puede dar gusto a todos los que la conocen, pero ya estaban delineados los personajes, formalizaron todo el trabajo de animación después de haber obtenido nuestras voces.”
Y a Daniel Giménez Cacho también le encantó prestar su voz al Santos:
“Al principio me dio mucho nervio porque para mi es un personaje importante en un momento de mi vida. Es fuerte, muy divertido, muy leído, y me preguntaba qué voz podría tener. Le entré relajadamente, a divertirme. Ya quedó y el público dirá…”
Regina Orozco hace lo propio para dar vida sonora a la Tetona Mendoza y en los otros personajes participan Irene Azuela; Bruno, Demián y Odiseo Bichir, Andrés Bustamante, Joaquín Cosío, Guillermo del Toro (quien debuta), Dolores Heredia, Héctor Jiménez, Cheech Marin, Jesús Ochoa, Cecilia Suárez, Julieta Venegas y Rocío Verdejo.
La historia (que se estrena en el 10° Festival Internacional de Cine de Morelia, a efectuarse del 3 al 11 de este mes y se proyecta en las salas comerciales de todo el país desde el día 30) presenta al Santos, un luchador acabado, pasado de peso y pacheco que sufre de su reciente divorcio con la Tetona Mendoza, una voluptuosa y salvaje mujer luchadora, quien también regentea un tugurio.
Para salir de la depresión, el Santos empieza una campaña filantrópica para ayudar a los Zombies de Sahuayo (personajes grises e inofensivos), empresa que pronto se convierte en negocio muy redituable y él aprovecha en su beneficio. Pero como los zombies se convierten en una plaga, la Tetona amenaza al Santos para que se deshaga de ellos, siendo el Peyote Asesino quien intente su destrucción, aún a costa de que un mundo sin zombies pueda resultar peor de lo que cualquiera hubiese imaginado.
Personajes atemporales
Lozano nació en la Ciudad de México en 1975 y ha filmado Matando cabos y Sultanes del sur. Platica que desde el inicio ya sabían quiénes harían las voces.
“Justo la idea era no realizar voces chistosas. Queríamos ver una película de acción viva, por eso llamamos a actores fuertes y no de doblaje, aprovechar el talento de los actores. En ese sentido ellos no se apegaron al guión sino que agrandaron al personaje, por eso hicimos todo al revés; primero grabamos las voces y luego ilustramos.”
Acentúa que se trata de “un largometraje pacheco” y revela que la tira cómica de Jis y Trino cuenta con un sinnúmero de jóvenes fans:
“Hay un compromiso con todos ellos, están esperando la película.
“Cuando sacamos el tráiler en Twitter notamos que existe mucho público que conoce este cómic cuyos personajes son atemporales.”
–En su animación de El Santos vs La Tetona Mendoza vemos a Vicente Fox y Martha Sahagún, y se menciona a Elba Esther Gordillo, pero se esperaban otros personajes más actuales como Felipe Calderón. ¿Qué pasó?
–No es una cinta de denuncia o propaganda, sino una comedia donde los problemas que se tocan siempre han existido. En este caso, sale Vicente Fox y pudo haber salido cualquier presidente de México y no cambiaría la escena, ni se necesitaría crear otro diálogo. No es una catarsis.
–¿Por qué no aprovechar todo?
–Creo que el filme sí es filoso, pero queremos que la gente se ría, no pretende cambiar el punto de vista político de alguien, sólo que la gente se ría.
–No se entiende por qué sale la escritora Elena Poniatowska en vivo unos segundos…
–¡Es una película pacheca!… En un momento de la película, completamente absurda, se pone de repente a esta intelectual y ya es el colmo de la pachequez. La cinta busca darle el giro a lo que se cree que va a pasar, pero pasa todo lo contrario.
“Es un largometraje que te libera. Te permite gritar ‘¡chichis y pachecas!’ y reír de muchas cosas. Es un género muy abandonado en el cine, y son unos personajes increíbles, por algo tienen tanto tiempo y fans. La idea era respetar el espíritu de la tira, la cual se siente mal dibujada por una decisión estética, y queríamos trasladar eso a la pantalla. Me gustó el resultado. Estoy feliz.”
La animación se hizo en computadora, pero con la técnica tradicional de cuadro por cuadro. El director de animación fue Andrés Couturier. El guionista, Augusto Mendoza y los productores Fernando de Fuentes y José Carlos García de Letona, de Ánima Estudios; Lynn Fainchtein, y Paco Arriagada Cuadriello.
Finalmente, los moneros jaliscienses Jis y Trino confiesan que sienten “muy padre” ver su tira cómica en la pantalla grande:
“Es como un extraño sueño lentamente concretándose. Ha sido muy emocionante, y estamos aún muy atolondrados, apenas estamos conociendo la película… Lynn se interesó en rodar el largometraje y pensó que serían dos años, pero resultó ser un proyecto difícil porque necesitábamos que alguien le metiera todo el interés y la lana. El Santos debía ser guarro y que fumara mota, entonces pasaron nueve guionistas, no eran malas sus ideas pero no era lo que queríamos como historia, hasta que encontramos a Augusto. Luego fue ver quién le metía dinero y le entró Ánima.”
Fuente: Proceso