La familia real británica costó a los contribuyentes en el último año 61 millones de dólares, incluidos generosos viáticos del príncipe Carlos y una costosa remodelación a la residencia de su hijo, el príncipe Guillermo. Tan sólo en los últimos dos años, una extensiva remodelación al palacio de Kensington, en el centro de esta ciudad, tendrá un costo de 7.6 millones de dólares.
El inmueble, residencia oficial de los duques de Cambridge Guillermo y Catalina, no ha sido renovado desde 1963. Entre los trabajos figura remover asbestos, cambiar las tuberías y reemplazar la instalación eléctrica, de acuerdo con el Palacio de Kensington.
Uno de los oficiales señaló que “los Cambridges han sido extremadamente sensibles al hecho de que el público está pagando mucho de estos trabajos”.
Otros gastos de representación en 2013-2014 incluyeron un viaje en jet privado del príncipe Carlos, con un costo de 420 mil dólares para asistir a los funerales del líder sudafricano Nelson Mandela en diciembre pasado, según con cifras oficiales.
Pero sin duda, los analistas británicos coincidieron en que el gasto más opulento fue el que hizo el príncipe Carlos: un viaje de cinco días en el lujoso tren real por Inglaterra, que tuvo un costo de 27 mil dólares.
Los gastos de viáticos en la casa real se duplicaron en el último año a 2.2 millones de dólares.
El costo del viaje del príncipe Carlos y su esposa Camila a India y Sri Lanka en noviembre pasado en representación de la reina Isabel II costó 679 mil dólares.
De acuerdo con el Sovereign Grant, el fondo público que el gobierno asigna cada año a la Casa Real, el dinero está destinado a mantener los palacios de Buckingham y de St. James, las oficinas y residencia del Palacio de Kensington, así como el Castillo de Windsor.
La contabilidad anual que se publicó en papel, muestra que más de la mitad del presupuesto está destinado a pagar sueldos de los empleados en los palacios reales, 33 millones de dólares, mientras que la tercera parte fue destinada a gasto de mantenimiento de los inmuebles.
La organización República contradijo la cifra oficial, al asegurar que los gastos son de casi 510 millones de dólares, ya que no toma en cuenta otros rubros como gastos en seguridad durante visitas reales, así como otros incentivos y subvenciones fiscales.
El movimiento republicano hizo un llamado al Parlamento para investigar “gastos ocultos” y detener este “abuso del dinero público”.
Fuente: Notimex