Las Fuerzas Armadas de Rusia exhibieron hoy su poderío militar en la Plaza Roja de Moscú durante el tradicional desfile con motivo del 71 aniversario de la victoria soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
El presidente de Rusia y comandante supremo de las Fuerzas Armadas, Vladimir Putin, presidió la tradicional parada militar, en la que mostraron algunos de los armamentos y aeronaves de combate empleados en la misión en Siria, informó la agencia de noticias Sputnik.
Más de 10 mil soldados, unos 200 vehículos blindados y sistemas de armamento recorrieron la Plaza Roja de Moscú, después que desde la tribuna principal, sobre el Mausoleo de Lenin, Putin pidió al mundo una nueva alianza contra la amenaza global del terrorismo.
En su discurso durante el festejo militar, el mandatario elogió el trabajo de las Fuerzas Armadas y subrayó que “Rusia está abierta a unirse a otras naciones” para afrontar las amenazas globales.
Aseguró que su país está dispuesto a trabajar en la creación de un sistema de seguridad internacional al margen de las alianzas.
“En estos momentos, la civilización se enfrenta de nuevo al horror y la violencia. El terrorismo se ha convertido en una nueva amenaza global. Estamos obligados a derrotar esa lacra y Rusia está dispuesta a unir fuerzas con otros Estados”, indicó Putin desde la tribuna.
Pero también aprovechó para advertir a los enemigos de esta nación que no pongan a prueba su fuerza. “Esta victoria es nuestro orgullo y nuestra disposición a defender los intereses del país. Y es una fuerte advertencia a aquellos que quieran poner a prueba nuestra fuerza”, dijo.
El jefe del Kremlin además felicitó a los rusos con motivo del 71 aniversario de la derrota de la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial, señalando que “el poder, la confianza y la dignidad” del país radican en la cohesión del pueblo ruso y su dedicación a la patria.
El Desfile de la Victoria sobre la Alemania nazi, que se celebra en Rusia cada 9 de mayo, recuerda a los 26 millones de muertos que causó entre los pueblos de la Unión Soviética aquella contienda, llamada aquí “la Gran Guerra Patria”.
En el desfile terrestre, Rusia mostró en la Plaza Roja más de dos centenares de vehículos blindados Bumerang, misiles balísticos intercontinentales RS=24 Yars y el sistema de defensa de misiles S-400, que protege la base rusa de Hamamim en Siria.
En este bloque también se exhibieron los militares de unidades de defensa contra la radiación, sustancias químicas y armas biológicas, que fueron hace 30 años los primeros en entrar en la planta nuclear de Chernóbil tras la explosión de uno de sus reactores.
Asimismo, destacó la participación por primera vez de las mujeres cadetes de la Universidad Militar, dependiente del Ministerio de Defensa, y de la Academia Militar Jrulev.
Mientras sobre el cielo moscovita participaron los bombarderos Tupolev Tu-95, dotados con misiles de crucero de largo alcance, el bombardero supersónico Tu-22M3 y el famoso “Cisne Blanco”, el Tu-160, una aeronave que está siendo sometida a proceso de modernización.
Desfiles similares se celebraron este lunes en las principales ciudades rusas, así como en la anexionada península de Crimea y en las regiones rebeldes ucranianas de Donetsk y Lugansk, donde se exhibió armamento ruso.
También hubo una parada militar y exhibición aérea en la base de Hamamim, cercana a Latakia (Siria), desde donde la Fuerza Aérea rusa realiza las misiones de apoyo a las fuerzas del presidente sirio, Bashar al Assad.
Fuente: AP