Desde el Ministerio de Justicia de Rusia señalan que el trabajo de la organización religiosa “crea una amenaza a la protección de los derechos e intereses de la sociedad y a la seguridad pública”.
El Ministerio de Justicia de Rusia ha incluido a los testigos de Jehová en la lista de organizaciones cuya actividad fue suspendida por el extremismo, informa el servicio de prensa del Ministerio. La lista incluye tanto al centro administrativo de los testigos de Jehová en Rusia, como a 395 organizaciones religiosas locales que forman parte de la organización.
Entre otras cosas, el Ministerio ha imputado a los testigos de Jehová la negativa de sus partidarios a recibir transfusiones de sangre. Según Moscú, el trabajo de la organización religiosa “crea una amenaza a la protección de los derechos e intereses de la sociedad y a la seguridad pública”. Por su parte, los representantes de los testigos de Jehová insisten en que nunca han participado en acciones radicales.
La organización Testigos de Jehová es un grupo religioso internacional fundado en 1881 en la ciudad de Pittsburgh, EE.UU. por el pastor estadounidense Charles Taze Russell. Su principio doctrinario se basa sobre la creencia del establecimiento de un paraíso en la Tierra, al que tendrán acceso únicamente 144.000 seres humanos, conocidos como ‘los ungidos’.
Esta organización internacional, que cuenta con 8 millones de seguidores a nivel mundial—unos 175.000 en territorio ruso—, ha tenido varios problemas con la ley en Rusia. En numerosas ocasiones se les ha impuesto multas por posesión de materiales extremistas o se les ha ordenado judicialmente el cierre de sus centros.
- El 20 de abril un juez del Tribunal dictaminó que los testigos de Jehová son una “organización extremista” y suspendió sus actividades en Rusia.
- El 17 de julio, el Tribunal Supremo de Rusia ratificó la prohibición de las actividades de los testigos de Jehová.