El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmoud Abbas anunció ayer la ruptura de todas las relaciones
con Israel y Estados Unidos, incluida la cooperación en materia de seguridad, al reiterar su rechazo al plan de paz para Medio Oriente del mandatario estadunidense Donald Trump.
Abbas habló en El Cairo ante los países miembros de la Liga Árabe, que respaldó a los palestinos en su oposición al plan de Trump.
El proyecto, apoyado por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, considera la creación de un Estado palestino desmilitarizado que excluya los asentamientos judíos en territorio ocupado y está bajo control casi total de la seguridad israelí.
Hemos informado a la parte israelí (…) que no habrá relación con ellos ni con Estados Unidos, incluidos los lazos de seguridad
dijo Abbas en la reunión de emergencia de un día, convocada para discutir el plan de Trump.
Instó a Israel a que ‘asuma sus responsabilidades en tanto que potencia ocupante
de los territorios palestinos.
Los funcionarios israelíes no hicieron comentarios inmediatamente.
Israel y las fuerzas de seguridad de la ANP han cooperado durante mucho tiempo en áreas de vigilancia de la Cisjordania ocupada que están bajo control palestino.
La ANP también tiene acuerdos de cooperación en información con la Agencia Central de Inteligencia (CIA), pese a que los palestinos comenzaron a boicotear la política del régimen de Trump en 2017.
Abbas también dijo que se había negado a discutir el plan con Trump por teléfono o incluso recibir una copia para estudiarlo.
Trump me pidió que le hablara por teléfono, pero le dije que no y quería enviarme una carta (…) pero la rechacé
, relató, y señaló que no quería que Trump pudiera decir que había sido consultado.
Abbas había anunciado en julio de 2019 su intención de no cumplir los acuerdos suscritos con Israel tras un recrudecimiento de las tensiones, aunque no cumplió sus amenazas.
Los palestinos tienen el derecho de mantener su lucha legítima por medios pacíficos para poner fin a la ocupación
, agregó antes de denunciar que el plan estadunidense viola los acuerdos de Oslo
, firmados con Israel en 1993.
El presidente palestino advirtió hoy que el plan sólo les concede la zona de Abu Dis, un barrio deprimido de Jerusalén Este, y no toda la parte oriental de la ciudad, ocupada en 1967 y anexionada en 1980 por Israel. No pasaré a la historia por vender Jerusalén
, afirmó.
Estos acuerdos, de los que Abbas fue negociador clave, permitieron crear la ANP y definir las relaciones con Israel en campos desde la gestión del agua hasta la seguridad y los lazos económicos.
Si los palestinos cesan de cumplir los acuerdos con Israel, tendrá consecuencia principalmente en la seguridad en Cisjordania.
Unos 400 mil colonos israelíes viven ilegalmente en este territorio, a menudo conflictivamente, con más de 2.5 millones de palestinos, y la cooperación de los servicios de seguridad palestinos e israelíes ha permitido desactivar decenas de atentados antiisraelíes.
Tel Aviv asegura que la Autoridad Palestina se beneficia de la estabilidad.
Para el jefe de la Liga Árabe, el egipcio Ahmed Abul Gheit, el plan estadunidense equivale a crear “un Estado con dos categorías de gente, lo que significa un sistema de apartheid, ya que convierte a los palestinos en ciudadanos de segunda clase. Es nuestro derecho aceptar o rechazar (el plan) aunque la propuesta estadunidense en realidad parece ser un dictado o una oferta que no se puede rechazar, ni siquiera discutir.”
En julio de 2017, Abbas anunció la suspensión de la coordinación en seguridad con Israel antes de restablecerla oficialmente un año más tarde.
Sin embargo, en ese año se mantuvo la colaboración en 95 por ciento de las actividades, según la policía palestina.
Aunque Abbas congeló las relaciones entre Ramala y Washington en diciembre de 2017 –tras el reconocimiento unilateral por Trump de Jerusalén como capital de Israel– la ANP mantuvo sus contactos con la CIA.
Fuente: Reuters/ AFP