En medio de una contingencia ambiental de siete municipios, un nuevo derrame con los mismos químicos, ocurrió el jueves en la misma zona cuando un muro de contención o represo que retenía miles o millones de litros solución ácida de cobre, falló.
Nuevamente la contaminación volvió a pintar los ríos Bacanuchi y Sonora, que viven crecidas históricas, pero cuyos niveles, al parecer causan más perjuicios que beneficios.
El alcalde de Arizpe, Vidal Vásquez Chacón, corroboró la falla del represo ayer por la tarde en una visita a caballo hacia la zona, del muro de tierra y piedras construido para contener parte del derrame del 6 de agosto en la mina Buenavista del Cobre de Grupo México.
“Supervisando el represo de protección de detención de los ácidos de la mina Buenavista que se reventó, esto antier”, publicó en su cuenta de Twitter.
Junto al texto, el edil publicó una selfie, en la que se ve parte de su rostro y el represo de contención carcomido por el paso de aguas.
De acuerdo con documentos de la Conagua y Protección Civil del estado, el apoderado legal de Buenavista del Cobre, Víctor del Castillo Alarcón, notificó a la Conagua el jueves 18 de septiembre que, debido a las lluvias de “Odile”, los represos Tinajas 1 y Tinajas 2 derramaron solución ácida de cobre, metales pesados y agua de lluvia.
La Conagua ordenó a la mina de manera urgente colocar el número suficiente de bombas en todos los represos, que desde antes debieron estar vacíos, para echar los tóxicos en sitios donde estén contenidos con seguridad.
Ayer, la Unidad Estatal de Protección Civil, informó al alcalde de Arizpe y otros municipios en el cauce del río Sonora, que tanto personas como animales deben evitar el contacto con el agua.
“Sigue restringido para todo uso las aguas superficiales y subterráneas en la franja restringida de los ríos Bacnuchi y Sonora, asimismo deben continuar difundiendo entre la población que evite todo contacto con las aguas superficiales del río, así como retirar ganado del mismo”, informó Carlos Jesús Arias.
