“Ya llegamos al límite de la tolerancia y de la paciencia. Estamos con la última instancia, como mexicanos, exigiéndole a usted como Presidente respuesta inmediata a la presentación de los 43 jóvenes desaparecidos”. Esto le dijo Felipe de la Cruz Sandoval a Enrique Peña Nieto durante la reunión que tuvieron familiares de los normalistas con el Presidente, el 29 de octubre, en Los Pinos.
En dos videos subidos por su hijo, Yosh, a su página de Facebook, se ve a Felipe de la Cruz hablarle sin rodeos al Presidente: “Si usted no tiene la capacidad para darnos la respuesta ya, también debe de estar pensando lo mismo que el gobernador de Guerrero. ¿A los cuántos días el gobierno federal tomó el caso?”
Le advierte: “Tendríamos que recurrir a las instancias internacionales, si usted no tiene capacidad de dar respuesta”.
Le exige: “Ya no más simulación de andarlos buscando en fosas, no están en fosas, están vivos”.
Con rostros serios, sentados en hilera, frente a los familiares, lo escuchan el presidente Enrique Peña Nieto; el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; Monte Alejandro Rubido García, comisionado nacional de seguridad; y el procurador Jesús Murillo Karam, entre otros.
De la Cruz le recuerda a Peña Nieto sus palabras, en el sentido de que iba a ir hasta las últimas consecuencias en la investigación de los hechos en Iguala, “caiga quien caiga” y “tope con quien tope”. “Usted es responsable de nuestro país, y tiene la calidad moral, entonces, caiga quien caiga y tope con quien tope, queremos justicia (…) Si usted no actúa, también va a ser culpable”, le dice.
Felipe de la Cruz sigue: “Usted ve el enojo en cada uno de los padres… No creo que a partir de este día usted pueda dormir tranquilo”.
Al finalizar su intervención, familiares corean:
-¿Quién se llevó a nuestros hijos?
-Los policías. El Estado mexicano.
Fuente: Reforma