De acuerdo con los resultados divulgados, el Partido Republicano retomaría por mínima ventaja el control de la Cámara de Representantes, se enfrenta a un empate en la disputa del Senado y gana la mayoría de las gubernaturas en disputa.
Las elecciones legislativas de EE.UU. apuntan a una recuperación de poder de los republicanos en el Congreso, según los primeros resultados de la noche electoral. Los estadounidenses votan para renovar la totalidad de los 435 escaños de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, ambos con una mayoría exigua hasta ahora para los demócratas. También eligen miles de cargos estatales y locales, algunos de gran importancia, como los gobernadores de 36 estados.
El recuento, que puede extenderse durante días en unas elecciones muy ajustadas en algunos estados clave, determinará cómo será de duro el castigo en las urnas a los demócratas. De momento, todo indica, como mostraban las encuestas, que los republicanos recuperarán la mayoría en la Cámara de Representantes del Congreso, su cámara baja.
Necesitan dar la vuelta a un mínimo de cinco distritos hasta ahora en poder de los demócratas y lo habían logrado en seis en la medianoche del martes, con más de la mitad de los escaños ya adjudicados.
Si acaban por conseguir la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, la agenda legislativa del presidente, el demócrata Joe Biden, se verá frenada en seco. Además, los republicanos utilizarán su nueva mayoría para impulsar comisiones de investigación contra el propio Biden y otros altos cargos de su Administración, como el fiscal general, Merrick Garland.
A la espera del recuento
Todavía está por ver si la ‘marea roja’, que muchos republicanos y algunas encuestas pronosticaban para este martes, se acaba por materializar. Con el paso del recuento, la posibilidad de que se produzca una debacle de los demócratas era cada vez menor, pero eso lo determinará el resultado final. Una mayoría exigua en la Cámara de Representantes exigirá al liderazgo republicano -que probablemente caerá en manos de Kevin McCarthy- ceder en algunos asuntos al ala más moderada del partido. El recuento dirá qué colchón tendrán los republicanos en la Cámara Baja.
Estas elecciones legislativas de mitad de mandato -‘midterms’, en su terminología en inglés- penalizan de forma tradicional al partido en el poder en la Casa Blanca. A eso se le suma que Biden está hundido en los índices de popularidad, la inflación disparada y la oleada de inseguridad que vive EE.UU. desde la pandemia de Covid-19, que han dominado los mensajes de los republicanos. Los demócratas trataron de fijar la campaña en la decisión del Tribunal Supremo -con una mayoría conservadora reforzada desde la presidencia de Donald Trump- sobre aborto y en el extremismo ‘trumpista’ que domina a parte del partido republicano.
Las cosas estarán mucho más ajustadas en las carreras por el Senado, que podrían tardar días en concretarse. En la actualidad, la mayoría de los demócratas es por la mínima: empatan a cincuenta senadores con los republicanos, pero el desempate lo rompe el voto de calidad de la presidenta de la cámara, la vicepresidenta Kamala Harris.
Por lo tanto, los republicanos solo necesitan dar la vuelta a un escaño para controlar el Senado. Los demócratas se encaminan a mantener algunos bastiones que parecían en peligro, como los escaños en disputa en Washington, Oregón, Arizona o New Hampshire, lo que deja menos posibilidades de victoria para los republicanos.
Batalla estado a estado
Todo apunta a que la mayoría en la Cámara Alta se definirá en una batalla larga y complicada en dos estados clave: Pensilvania y Georgia. Será una suerte de reedición de lo ocurrido en las presidenciales de 2020, cuando Joe Biden logró inclinar la elección a su favor frente a Donald Trump por muy poca diferencia, entre otros, en estos dos estados.
En la medianoche del martes, el republicano Herschel Walker y el demócrata Raphael Warnock empataban con un 49% de los votos y el 86,7% del escrutinio. Mientras tanto, en Pensilvania, el único estado donde los demócratas pueden conseguir un escaño que por ahora no controlan, el demócrata John Fetterman llevaba una ventaja corta frente al republicano Mehmet Oz (50%-48%), con el 81% de los votos escrutados.
El recuento también avanza muy igualado en Wisconsin entre el republicano Ron Johnson y el demócrata Mandela Barnes, aunque con ventaja para el primero.
La composición final del Senado tendrá una importancia capital en el reparto de poder en EE.UU. Si los demócratas lo conservan, servirá de contrapeso a la mayoría republicana en la Cámara de Representantes. Perderlo ampliará la capacidad de maniobra de los republicanos en los dos últimos años del primer mandato de Biden y le impondrá cortapisas para muchas decisiones, como las nominaciones de candidatos, por ejemplo, al Tribunal Supremo.
Fuente: ABC.es
