El reportaje sobre la compra de la casa blanca de Enrique Peña Nieto y Angélica Rivera a un contratista del gobierno (Grupo Higa), ganó el Premio Gabriel García Márquez de Periodismo la noche de este miércoles en Medellín, Colombia.
Los autores del reportaje agradecieron el reconocimiento y fue Carmen Aristegui la encargada de dar un mensaje.
La periodista comentó que la compra del inmueble en el que vivía el presidente con su esposa, “es un escándalo por los cuatro costados”; lamentó la salida del aire de su programa radiofónico en MVS y sostuvo que los empresarios no tienen derecho a censurar.
Además, reiteró que presentará una denuncia ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), contra el Estado mexicano, por denegación de la justicia, debido a que no continuó su juicio, abierto tras su salida del aire, por decisión de un tribunal mexicano que atendió una queja de MVS.
El reportaje fue publicado el 9 de noviembre pasado en este sitio de noticias. De inmediato desató un escándalo en el país, ya que no se conocía la compra de este inmueble, que continuaba a nombre del contratista que hizo la casa al gusto del Presidente. La primera dama Angélica Rivera salió a dar explicaciones en cadena nacional, pero no fueron suficientes, no obstante que anunció que ya no compraría la casa valuada en millones de dólares, que se encontraba pagando.
El presidente Peña Nieto ordenó una investigación a la Secretaría de la Función Pública, que hasta meses después concluyó que no existía conflicto de interés ni nada indebido en la compra de la casa blanca, ni en la de otras dos (la de Ixtapan, de Peña, y la de Malinalco, de Luis Videgaray), también a contratistas del gobierno.
Pero el reportaje sí tuvo consecuencias para los periodistas que lo dieron a conocer: Aristegui y su equipo fueron despedidos de forma fulminante de MVS, en marzo pasado, bajo diferentes supuestos motivos. La periodista y su equipo consideraron que se trataba de un castigo, ejecutado por una mano escondida del gobierno de Peña Nieto, que trató el asunto como un conflicto “entre particulares”, es decir entre la empresa y la periodista.
Fuente: Aristegui Noticias