Un hombre al que le fue administrada una inyección letal este miércoles por la tarde en Arizona murió luego de agonizar por casi dos horas, según autoridades locales.
Joseph Rudolph Wood, de 55 años, fue ejecutado en una prisión estatal en Florence luego de que las cortes supremas estatal y federal negaran aplazar el procedimiento.
La defensa quería conocer más sobre las dos drogas que se utilizarían para ejecutarlo, incluyendo quién las fabrica.
Sin embargo, tanto la Corte Suprema federal como una corte de apelaciones desecharon este martes la solicitud de la defensa, al afirmar que Arizona tiene derecho a mantener bajo secreto todo lo relacionado con las drogas empleadas.
Enseguida, los abogados intentaron sin éxito este miércoles por la mañana que la Corte Suprema de Arizona detuviera la ejecución, luego de que argumentaran que su cliente no fue bien representado durante su sentencia y que no se podía mantener bajo secreto el contenido de la inyección letal que recibiría. Sin embargo, la máxima corte estatal también rechazó las peticiones.
Wood comenzó a ser ejecutado a la 13:52 horas (local). Aunque cinco minutos después comenzó a serle administrado el coctel letal, una hora después el reo seguía con vida, según la defensa. El reo finalmente murió a las 15:49 horas (local), informaron las autoridades penitenciarias.
Wood fue sentenciado a muerte por los asesinatos de Debra Dietz y su padre, Eugene Dietz, en 1989, en un taller mecánico de Tucson.
Wood y Dietz tenían una tumultuosa relación en la que él varias veces la golpeó. El padre de la mujer intentó protegerla y evitar que la siguiera viendo, pero Wood reaccionó con enojo, disparando contra ambos.
Fuente: AP
