Después de que la Procuraduría de Veracruz anunció la detención de un presunto responsable del homicidio de la periodista Regina Martínez, la organización Article 19 fijó un posicionamiento mediante el cual “manifiesta su escepticismo ante el supuesto esclarecimiento del asesinato”.
“La Procuraduría General de Justicia de Veracruz dio por esclarecido el asesinato de la periodista Regina Martínez, corresponsal del semanario Proceso, cometido el 28 de abril pasado en la ciudad de Xalapa. El anuncio llega justo al cumplirse seis meses del crimen, tras un largo silencio oficial sobre el resultado de las investigaciones, los responsables materiales e intelectuales”, afirma Article 19.
Recientemente, recuerda, el gobierno estatal ya había dado carpetazo a otros tres casos basado sólo en una supuesta confesión de personas que no habían sido sometidas a proceso.
“Rafael Rodríguez Castañeda, director de la revista Proceso, para la cual trabajaba la periodista, ha asumido con “total escepticismo” las conclusiones de la Procuraduría de Veracruz, pues aunque eran coadyuvantes en el caso fueron ajenos a la investigación de la cual quedaron apartados totalmente, lo mismo que la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra Periodistas de la PGR”, explica la organización.
“La desconfianza en los resultados de la investigación ha sido alimentada por la filtración interesada a los medios de versiones sobre un “crimen pasional o de motivaciones personales”, en las que además se aseguraba que el asesino se encontraba entre el gremio periodístico de Veracruz, que había estado en el sepelio y después había desaparecido”, señala Article 19 en un comunicado de prensa.
Al igual que en agosto pasado, ARTICLE 19 considera inadmisible la pretensión de dar por esclarecido el crimen sin un proceso de desahogo de pruebas y una sentencia condenatoria que garantice justicia y efectiva reparación del daño.Durante seis meses, el gobierno local no sólo consintió y favoreció con su silencio la especulación, sino que en sus conclusiones ensucia a la víctima al sugerir que Regina Martínez convivía y permitió entrar a sus asesinos, quienes fueron descritos peyorativamente por el procurador estatal como “malvivientes”.
“Hoy Veracruz es la entidad más peligrosa para ejercer libremente la actividad periodística, la más opaca en la asignación de contratos de publicidad oficial, la más pródiga en amenazas veladas contra periodistas que tienen que optar por el exilio. Una vez más, exigimos a las autoridades de procuración de justicia en Veracruz apegarse al principio de debido proceso en su actuación, y respetar los derechos y la dignidad de la víctima sus familiares y a quien se ha presentado como presunto responsable”, se agrega.
“La Corte Interamericana de Derechos Humanos permite precisar que el esclarecimiento de crímenes contra periodistas no termina con la presentación de los posibles autores; el Estado sólo habrá proporcionado a las víctimas y a sus familiares un recurso efectivo contra el delito cuando haya cumplido con su obligación general de investigar y sancionar. Tratándose de una comunicadora social, esta obligación del Estado es también para con el medio y la sociedad”, de acuerdo con la organización.
Sitio oficial de la organización: Article 19