El mandatario estadounidense, Barack Obama, recibió como regalo de cumpleaños de asociaciones pro inmigrantes una carta con 70 mil firmas para pedir un alto a las deportaciones de millones de indocumentados.
Organizaciones no gubernamentales pro inmigrantes entregaron este lunes al presidente Barack Obama como regalo de cumpleaños una petición con más 70,000 firmas con la que lo instaron a parar las deportaciones de millones de inmigrantes indocumentados que viven actualmente en Estados Unidos.
La entrega de la petición con las 70,000 firmas coincidió con la celebración del cumpleaños de Obama, que hoy cumple 53 años.
United We Dream, America’s Voice y el Centro de Trabajadores de Nueva Orleans para la Justicia Racial fueron las organizaciones encargadas de hacer formalmente la entrega de firmas a la Casa Blanca.
“El presidente no tiene ninguna otra opción que actuar”, dijo Cristina Jiménez, cofundadora de United We Dream, la mayor oganización de jóvenes inmigrantes del país.
A finales de junio, el presidente de Estados Unidos Barack Obama dio por muerta la reforma migratoria, ante la negativa de los republicanos a someterla a un voto en la Cámara de Representantes y anunció que después del verano utilizará sus poderes ejecutivos para reparar sin el Congreso el “sistema de inmigración roto”.
Las organizaciones pro reforma migratoria han sido hasta ahora muy críticas con la política de deportaciones de Obama, al que llaman “deportador en jefe”, pues ha expulsado del país a más de dos millones de indocumentados desde que llegó a la Casa Blanca, unos 1,100 al día, según sus cálculos.
“Él tiene que arreglar su legado como el jefe de las deportaciones”, dijo Jiménez, quien acusó a los republicanos de explotar la crisis que se observa en la frontera con los niños que llegan de Centroamérica “para atacar a la comunidad inmigrante”.
La cofundadora de United We Dream se refirió de esa forma a la llegada a la frontera sur de Estadods Unidos desde el pasado mes de octubre de más de 57,000 menores no acompañados, procedentes la mayoría de ellos de El Salvador, Honduras y Guatemala.
Jiménez considera que “la estrategia política de los republicanos es intimidar al presidente para que no tome acciones”, por eso los grupos pro reforma migratoria van a seguir “presionando al presidente porque él no puede darse por vencido ante los ataques de los republicanos”, añadió.
La confundadora de United We Dream se mostró “optimista” ante las informaciones de que la Casa Blanca estaría considerando ampliar el programa de acción diferida (DACA, por sus siglas en inglés) a los padres de los llamados “soñadores” y a los padres de niños que tienen ciudadanía estadounidense.
“No nos vamos a dar por vencidos hasta que el presidente nos de lo que tiene que dar para proteger a nuestros padres y nuestras familias”, añadió Jiménez.
Unos 600,000 jóvenes indocumentados que llegaron a Estados Unidos siendo niños traídos por sus padres se han beneficiado de DACA, un programa aprobado en junio de 2012 por la administración Obama.
Gracias a DACA, estos “soñadores”, como se conoce en Estados Unidos a estos jóvenes, han podido, por ejemplo, estudiar en la universidad, obtener un permiso de trabajo, tener un número de seguridad social y sacarse el carnet de conducir sin temor a ser deportados.
Sin embargo, estos jóvenes han visto como muchos de sus padres han sido deportados a su país de origen por no tener los papeles en regla.
Hasta después del verano no se espera que Obama anuncie que tipo de medida tomará por decreto en materia de inmigración.
Fuente: DPA