Los inconformes contaron del uno al 43 para recordar a cada uno de los jóvenes desaparecidos durante los hechos violentos en Iguala, Guerrero, el 26 de septiembre de 2014.
Los inconformes que portaban mantas con la leyenda “fuera Peña” contaron hasta el número 43 en alusión a cada uno de los estudiantes desaparecidos de la normal “Raúl Isidro Burgos”.
El Festival Internacional Cervantino (FIC), el cual inició 7 de octubre y concluye este día es una celebración a la cultura y a la ciencia. En el arranque de actividades, su director Jorge Volpi comentó que ante los sucesos violentos ocurridos en el país, el reto es recuperar la paz, atenuar la desigualdad, crear un sistema de justicia eficaz y confiable, así como vencer la corrupción.
“Pero nadie debería dudar que los instrumentos más claros para conseguir estas metas se encuentran en la ciencia y la cultura. Un país que nos garantiza su calidad y su expansión, a través de instituciones sólidas y confiables y de amplios presupuestos que no se hallen sometidos a los vaivenes económicos”, expresó el también escritor.
Volpi abundó que habrá quien argumente que el fin de la violencia no derivan esencialmente de la ciencia y la cultura, como si estas disciplinas fuesen coto exclusivo de las grandes potencias o una veleidad concedida a los pocos que la cultivan.
Pero a lo largo de la historia se ha demostrado, agregó Volpi, que estas dos áreas, las cuales intentara demostrar el Cervantino en estos días, son una misma, representan lo mejor del ser humano y pueden convertirse en la argamasa imprescindible para construir sociedades más informadas y más cultas.
“Frente a tantos problemas y amenazas, tenemos que reunir el valor de concebir un nuevo proyecto de sociedad, un proyecto de futuro. No una utopía perfecta, modelo suficientemente desacreditado tras la caída del consumismo, pero sí un mundo mejor”, precisó.
Asimismo dijo que desde la ciencia y la cultura hay que atreverse a imaginar nuevas estrategias, espacios y relaciones de convivencia y de poder, pues son pilares de la educación que se imparte a los niños desde la primaria hasta la universidad.
A lo largo de 19 días, el FIC, que es considerado la cita artística más vasta y relevante del continente americano, ofreció una muestra de lo mejor del arte y la ciencia de México y del mundo.
En su oportunidad, el gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, señaló que es importante conservar la esencia del ser, no perder la identidad de Guanajuato y si algo “nos la da es precisamente la cultura”.
Subrayó que por eso las raíces se han afirmado en esta prodigiosa tierra para proyectar al mundo los valores inigualable herencia cultural que hace grande a Guanajuato.
“Por eso hoy la cultura está contribuyendo a elevar la calidad de vida de las y los guanajuatenses. El Festival Internacional Cervantino, es el encuentro cultural más importante de América Latina y que desde 1972 es considerado entre los cinco más importantes del mundo”, señaló.
La edición XLIII del festival fue más guanajuatense que nunca, pues contó con la participación de más de mil 300 creadores del este estado.
“Por eso el arte debe de ir más allá del entretenimiento, para que se convierta en una herramienta de transformación y de cambio social”, apuntó Márquez Márquez.
En su edición XLIII el Festival Internacional Cervantino ofreció a lo largo de 19 días, más de 450 actividades en todas las disciplinas artísticas, las cuales estuvieron a cargo de tres mil artistas provenientes de 27 países.
Fuente: Sin Embargo
