El ex obispo de Limburgo, Franz-Peter Tebartz-van Elst, destituido por gastar 31 millones de dólares de la iglesia en su residencia episcopal, fue designado como ‘delegado para la catequesis’, un nuevo puesto creado especialmente
Franz-Peter Tebartz-van Elst, famoso por el sobrenombre de “obispo derroche” u “obispo de lujo” y destituido de su puesto en Alemania tras una polémica por los costos de una residencia episcopal, reapareció en el Vaticano con un cargo de segundo nivel.
El ex obispo de Limburgo fue autorizado en diciembre pasado a ocupar de nuevo un puesto, creado especialmente: “delegado para la catequesis” en el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización.
El nuevo cargo fue aprobado por la Secretaría de Estado del Vaticano con una carta del 5 de diciembre de 2014, aunque todavía el clérigo no asumió su puesto.
Su nombre captó la atención mundial tras una controversia generada en su anterior diócesis, Limburgo, luego de que un grupo de fieles denunció el costo excesivo de la restructuración de la residencia del obispo, cuyo presupuesto inicial era de 2.5 millones de euros y terminó siendo de 31.
El caso primero llegó a la prensa alemana y la Conferencia Episcopal de Alemania realizó una investigación, cuyos resultados fueron remitidos a la Congregación para los Obispos del Vaticano.
El 26 de marzo de 2014 la Santa Sede emitió un comunicado en el cual se informó del alejamiento definitivo de Tebartz-van Elst, con una renuncia anticipada que fue aceptada por el Papa, en virtud de que “se creó una situación que impide el ejercicio fecundo del ministerio”.
Esa nota anticipaba entonces que “el obispo saliente recibirá en tiempo oportuno otro encargo”.
Fuente: Notimex
