La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) tiene que reabrir y resolver una investigación por prácticas monopólicas relativas de las cerveceras Grupo Modelo y Cuauhtémoc-Moctezuma, resolvió una juez federal.
Rafaela Franco, juez Primera Especializada en Telecomunicaciones y Competencia, concedió un amparo a la cervecera estadounidense SAB Miller, y declaró ilegal la resolución de 2013 por la cual la Comisión dio por cerrada la indagatoria contra las empresas mexicanas sin aplicarles sanciones, a cambio de ciertos compromisos sobre sus prácticas comerciales y de contratos de exclusividad.
Con base en un criterio fijado en 2015 por la Suprema Corte de Justicia, Franco determinó que las investigaciones por prácticas monopólicas relativas no se pueden dar por cerradas de manera anticipada mediante un acuerdo con las empresas denunciadas, sino que la Comisión tiene que aclarar si las prácticas existieron y generaron daños a los denunciantes.
La comprobación de daños puede a su vez llevar a que SAB Miller -ahora propiedad de AB InBev- reclame el pago de perjuicios a Modelo y Cuauhtémoc.
AB Inbev adquirió en 2013 a Grupo Modelo y posteriormente, en 2015, a SAB Miller.
“Las quejosas tienen el derecho a que la investigación iniciada con motivo de su denuncia sea resuelta, pues pensar lo contrario es tanto como desconocer lo dispuesto en el Artículo 32 de la Ley Federal de Competencia Económica”, dice la sentencia de Franco.
Dicha circunstancia es la que explica la importancia de que denuncias como la presentada por las impetrantes del amparo, continúe su cauce legal, a fin de ser resuelta por la autoridad responsable revisando los hechos denunciados, pues por la naturaleza de éstos, existe la presunción de que se haya afectado a los participantes en los mercados investigados”, agrega.
La Cofece –que ahora es un órgano autónomo con distintos comisionados– puede impugnar la sentencia ante un Tribunal Colegiado de Circuito, pero lo más probable es que el amparo será confirmado, precisamente porque ya existe un criterio de la Corte sobre la forma en que deben conducirse este tipo de investigaciones.
“Los compromisos presentados por ambas cerveceras dominantes están limitados por varias exclusiones importantes que continúan impidiendo el libre acceso a la mayoría del mercado de ventas minoristas de cerveza, así como a amplias e importantes regiones del país”, afirmó SAB Miller cuando presentó su amparo.
El trámite del juicio se fue atrasando debido a la interposición de múltiples recursos de las cerveceras denunciadas, y también porque emigró de un juzgado a otro en 2014, cuando entraron en funciones los órganos especializados en telecomunicaciones y competencia económica.
La denuncia original contra Cuauhtémoc y Modelo fue presentada ante la CFC en 2010 por SAB Miller y las cerveceras artesanales Tempus y Minerva.
Fuente: Reforma