El grupo Topos reportó la tarde del sábado que los perros rastreadores detectaron más cuerpos en una zona de la Torre de Pemex a la que no se había podido llegar, según reporte la agencia de noticias de Proceso.
La Procuraduría General de la República dijo este sábado que ya entregó a sus respectivos familiares los cuerpos de 33 personas fallecidas en la explosión ocurrida en la torre B de las oficinas administrativas del Petróleos Mexicanos.
Los trabajos de búsqueda de más cuerpos se concentran en hallar a 16 personas que supuestamente están atrapadas en el área de pilotaje del edificio B2.
Uno de los integrantes de la brigada Topos dijo a la prensa que se utilizará maquinaria especial, ya que se tendrán que reventar dos lozas de concreto.
En el punto donde se cree que hay víctimas atrapadas se colocaron respiradores para ayudar a posibles sobrevivientes.
Las autoridades federales detuvieron los trabajos sólo por una hora para apuntalar la zona, pero se espera que se reinicien las labores.
Los rescatistas buscan a 13 trabajadores del área de Recursos Humanos y tres encargados del mantenimiento de la torre.
En el lugar se encuentran peritos extranjeros que revisan la zona y colocan etiquetas a diversos restos de objetos de entre los escombros.
Familiares de tres personas que trabajaban para la empresa Co Picosa, subcontratada por Petróleos Mexicanos, exigieron este sábado informes sobre sus seres queridos ya que no están en las listas de muertos ni de heridos.
Los trabajadores desaparecidos son Luis Ojeda, de 57 años, Gregorio Vite y Enrique Hernández, ambos de 55 años.
Las autoridades informaron que estos tres hombres son buscados entre los escombros.
