Aunque no tenga comida, buenos servicios de salud y educación, el mexicano ¡está feliz!
Por Pedro Echeverría V
1. “México tiene los peores niveles de calidad de vida entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), sólo por arriba de Turquía y debajo de otros países latinoamericanos como Chile y Brasil. De acuerdo con el Índice para una Vida Mejor, presentado ayer por el organismo, los niveles más bajos para el país son la seguridad, la educación, el empleo y el ingreso. Sin embargo, para el país el índice de satisfacción es uno de los más altos, “los mexicanos están más satisfechos con su vida que el promedio de la OCDE. El 85% de las personas dice tener más experiencias positivas en un día normal -sentimientos de paz, satisfacción por sus logros, gozo- que negativas -dolor, preocupación, tristeza, aburrimiento-“. ¿Para qué protestar?
2. ¿Cómo explicar eso de estar “pobres pero felices”? La TV con sus innumerables programas de diversión y entretenimiento, con sus múltiples novelas de amor, sexo y risa, desvía con facilidad cualquier pensamiento de protesta o rebeldía. ¿Cómo entonces gobierno y empresarios no entregarle a los dueños de la TV sus presupuestos y riquezas si cumplen efectivamente con el papel de amansador de masas? La “democratización” de la TV y radio, la digitalización, las reformas de los medios de información, no son otra cosa que la concentración de riquezas entre los más poderosos. Con o sin el monopolio de Televisa y TV Azteca, cualquier apertura de más canales televisivos sigue teniendo como objetivo controlar la audiencia con diferentes programas que sean más de lo mismo. ¿Puede acaso el capitalismo dejar en otras manos la formación de la conciencia?
3. En México, el ingreso familiar disponible neto ajustado promedio es de 12 mil 732 dólares al año, cifra menor que el promedio de la OCDE, de 23 mil 047 dólares. “La brecha entre los más ricos y los más pobres es considerable; la población situada en 20% superior de la escala de ingresos gana 13 veces lo que percibe la población que ocupa 20% inferior”. En materia de medio ambiente las partículas suspendidas PM10, que causan daños a los pulmones, se encuentran en la atmósfera en una concentración mayor que en muchos de los países que conforman la OCDE. Respecto al nivel educativo, el índice mostró que 36% de los adultos entre 25 y 64 años han obtenido el equivalente a un título de escolaridad secundaria, cifra mucho menor que el promedio de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo Económicos de 74.
4. Lo decía hace unos 20 años Azcárraga padre, dueño de Televisa: “Yo no voy a dar en televisión educación o programas culturales, que de eso se encargue la SEP; yo doy entretenimiento a un pueblo ignorante que regresa a su hogar cansado del trabajo”. Azcárraga (el “Tigre”) murió multimillonario y el gobierno le hizo grandes homenajes. ¿Por qué en Brasil, México, Argentina, España, en muchos más países, es muy grande el fanatismo hacia el fútbol? ¿Por qué los grandes millonarios, sobre todo los ligados a la TV y los otros medios de información buscan tener equipos en propiedad? Porque son un buen negocio económico donde las masas ponen su dinero, además donde esas mismas masas se entretienen y olvidan sus problemas. Es tan grave la situación que si la TV desapareciera habría en México mil y un suicidios.
5. Mientras más jodidos están los mexicanos más contentos se manifiestan. Dicen por aquí: “¿Para qué tanto brinco si el suelo es parejo?”. Les decía en otra ocasión que una amiga de hace 50 años me decía: “Pedro, sigues en lo mismo; ¿Para qué meterse en problemas si dios siempre provee, si los más pobres entrarán con más facilidad en el reino de los cielos y el destino está trazado?”. No sólo es la manipulación de los medios electrónicos las que sufre el pueblo, también la iglesia tiene mucho peso entre los sectores más humildes. Sin embargo esto de la manipulación de la conciencia, al parecer, nunca se acaba porque la gente busca seguridad, necesita vivir atada a algo (una creencia) que le de confianza en que su vida continúa. Si no afianzado en las cosas materiales que proporciona el capitalismo: coche, casas, sí a sus creencias por aquel “miedo a la libertad”.
6. ¿Cómo entonces las izquierdas pueden arrancar de “la comodidad del hogar” a millones de mexicanos que -aunque no tengan para comer- están muy felices atados a sus novelas y demás programas de diversión? ¿Cómo ofrecer a las familias, los mismos gustos, las mismas comodidades, la misma seguridad, para que comprenda la liberación que les ofrecemos y nos acompañe en la lucha social? Pero si le ofrecemos lo mismo que enseña la ideología de la clase dominante, entonces nada podrá cambiar. Sin embargo, aunque muy difícil, las luchas sociales en las calles de la Coordinadora (la CNTE), de los estudiantes, de los zapatistas, de los campesinos, están enseñando que aunque con lentitud desesperante, las batallas están avanzando. El pueblo trabajador merece la felicidad real, no la falsa creada por los medios para olvidar el hambre.
Blog del autor: http://pedroechverriav.wordpress.com