El ex presidente catalán Carles Puigdemont y el ex consejero Toni Comín se convirtieron desde ayer en diputados del Parlamento europeo de pleno derecho, gracias a la sentencia emitida el pasado jueves por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre la inmunidad de Oriol Junqueras, ex vicepresidente catalán encarcelado y cumpliendo condena en España. Tras recoger su acta provisional, Puigdemont afirmó: La justicia europea dice que somos eurodiputados desde julio pasado. Y hay que cumplir las leyes.
Tras la sentencia emitida por el TJUE los servicios jurídicos de la Eurocámara presentaron un informe a su presidente, David Sassoli, sobre la inmunidad de Junqueras, quien fue condenado a 13 años de prisión por su papel en la declaración unilateral de la independencia catalana en 2017.
La nueva condición de Puigdemont como europarlamentario supone un nuevo revés para el Estado español ya que el Tribunal Supremo tiene abierta una causa contra él por los delitos de rebelión, sedición, malversación y desobediencia, pero no han podido actuar en su contra, pues un juzgado alemán y otro belga rechazaron repetidamente entregarlo a España por no reconocer como delitos los cargos que se le imputan al ex presidente catalán.
Esto aumentó el nerviosismo dentro del gobierno en funciones de Pedro Sánchez, del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), quien aún negocia los apoyos que le permitan tomar posesión como presidente y formar gobierno. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), cuyo líder es precisamente Junqueras, suspendió las conversaciones con el PSOE, pues los independentistas exigen su liberación inmediata, la restitución de todos sus derechos y la liberación del resto de los presos políticos para sentarse de nuevo a dialogar.
A pesar de que todo se ha complicado más aún para los intereses del presidente Sánchez, la vocera del gobierno y ministra de Educación, Isabel Celaa, declaró en el Consejo de Ministros que todavía hay posibilidades de que se forme un nuevo gobierno antes de que finalice el año.
Fuente: La Jornada