Investigadores estadounidenses realizaron con éxito pruebas de sangre para la depresión. Y no solo pueden ayudar a diagnosticar y tratar a los pacientes, sino también puede ayudar a remover los estigmas de enfermedades mentales comunes.
La depresión es uno de desórdenes mentales más comunes, según la siquiatra de Northwestern University que desarrolló la prueba de sangre, Eva Redei.
“La Organización Mundial de la Salud estima que unos 350 millones de personas sufren de depresión anualmente”, destacó la científica durante una entrevista telefónica, añadiendo, que el número probablemente esté subestimado.
Típicamente la depresión es diagnosticada durante una entrevista con un terapeuta, pero Redei dice que buscaba una prueba biológica por la forma en que ella ve la depresión.
“Creo que se originó en mi punto de vista de que la depresión es una enfermedad, como cualquier otra. Y si esto es una enfermedad, quiere decir que también puede ser diagnosticada de una manera más objetiva”, dijo.
Sus pruebas miden nueve características, o marcadores, en la sangre. Los resultados le pueden decir a un médico si el paciente está deprimido.
Y Reid dice que las marcas de la sangre muestran mejoras a medida que el paciente es sometido a un tratamiento de psicoterapia para su depresión.
Este fue un pequeño estudio, y hay mucho más por investigar antes de que las pruebas de sangre estén a disposición de los médicos. Pero la profesora Eva Radei dice que “está segura” que un día las pruebas de sangre también podrán detectar otras enfermedades mentales.
Fuente: Voz de América