El Protocolo de Estambul aplicado a Alejandro La Coneja Gutiérrez, ex secretario general del CEN del PRI, en las instalaciones del Cereso de Chihuahua, donde está recluido por la acusación de presunto autor del desvío de 250 millones de pesos, concluyo que no existió ningún tipo de tortura contra el detenido, publica El Heraldo de Chihuahua.
La Coneja, operador de Manlio Fabio Beltrones en el PRI.
El llamado protocolo de Estambul, una betería de priebas que sirve para verificar si una persona fue torturada, el 28 de febrero y durante dos días por el doctor Hernán Reyes, experto del “Human Rights Center” de la Universidad de California, EU. El dictamen emitido resuelve que no hubo ningún tipo de tortura, como alegaron en su momento la defensa y el propio candidato presidencial del PRI José Antonio Meade.
La información trasciende luego de que finalmente la Secretaría de Hacienda entregó al gobierno de Chihuahua los 900 millones de pesos retenidos, en cumplimiento del convenio suscrito por el gobernador Javier Corral con la Secretaria de Gobernación en el cual la adminstración local se comprometió a trasladar a La Coneja al penal federal de Ciudad Juárez.
En el proceso se realizaron varias dinámicas con Gutiérrez, destacando el aspecto psicológico y físico; se revisaron instalaciones del penal y el peritaje transcurrió sin incidentes, determinado con ello que no existió tortura de ninguna índole hacia esta persona. De igual forma, en torno a la postura de Gutiérrez, éste solicito al doctor Hernán Reyes que lo acompañara en el proceso de reubicación que se pretende de su persona a un penal federal.
Duarante la aplicación del protocolo, el doctor Hernán Reyes, de la Universidad de California, estuvo acompañado por algunos mandos de la Fiscalía de Chihuahua, así como directivos del penal y representantes de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH). Los abogados defensores del detenido siguen pidiendo el traslado al penal federal de Ciudad Juárez.
Gutiérrez Gutiérrez se encuentra preso en el Cereso de Aquiles Serdán por el delito de desvío de 250 millones de pesos a las campañas del PRI. Fue a mediados del mes de febrero cuando personal de la corporación federal aplicó el protocolo al empresario coahuilense, quien se encuentra interno.
Tras las denuncias de tortura en su contra, el fiscal general del Estado, César Peniche Espejel, negó en todo momento que existiera un trato inadecuado hacia Gutiérrez en la cárcel.
(Con información de El Heraldo)