Con banderas de Estados Unidos y pancartas exigiendo volver al trabajo, miles de personas protestaron en varias ciudades de California para exigir que se levanten las órdenes de confinamiento en vigor por seis semanas.
Manifestaciones de este tipo se realizaron en 11 ciudades del Estado más poblado del país, incluida la capital, Sacramento, San Francisco, Los Ángeles y San Diego.
En Sacramento, mientras la policía daba pasos afuera del Capitolio, los manifestantes agitaron carteles que decían “Defiende la libertad” y rompieron en cánticos “U-S-A”. Un pequeño avión voló en círculos sobre su cabeza, mostrando una pancarta con una imagen de la cara de Newsom y el eslogan “Termina su tiranía”.
“¡Abran California, abran California!”, gritaban los manifestantes cerca de las playas de Huntington Beach, cerradas por orden del gobernador Gavin Newsom luego que el fin de semana pasado, de mucho calor, estuvieran repletas de gente.
“Todos estamos impacientes”, dijo el gobernador durante su sesión informativa diaria, y agregó: “Tenemos que ser realmente deliberativos sobre cómo reabrir esta economía”.
Las playas de los condados de Los Ángeles y San Diego llevan semanas cerradas al público, a diferencia de las del vecino Orange, que abarca Huntington y Newport Beach y que estaban abiertas, atrayendo a decenas de miles de personas.
“Todos los trabajos son esenciales”, “La libertad es esencial”, se leía en algunas de las pancartas en la manifestación de esta ciudad a unos 55 kilómetros de Los Ángeles, a donde acudieron unas 700 personas y que fue custodiada por la Policía montada.
El cierre de la playa fue “la gota que colmó el vaso. Fue innecesario”, dijo una manifestante. “También estamos diciendo que ya es suficiente, tenemos derecho a trabajar… y es hora de que el gobernador permita que los sanos puedan volver a sus negocios”.
En Sacramento, la Policía arrestó a más de 20 personas.
En Nueva York y Chicago también protestaron, un día después de que en Lansing (Michigan) manifestantes armados, algunos con fusiles de asalto, ingresaron al edificio del legislativo para exigir el levantamiento del confinamiento.
Aunque Florida sumó ayer más de mil nuevos casos confirmados de COVID-19, al llegar a casi 35 mil, y las muertes ascendieron a mil 314, centenares de personas con yates remolcados buscaron salir al mar en el Sureste del Estado, el sector más golpeado por la pandemia.
Las rampas de acceso, como Black Point, en Homestead, se abarrotaron, por lo que muchos de los que pensaban tomar aire fresco se vieron obligados a regresar a sus casas, luego de varias semanas de confinamiento obligatorio.
Fuente: AFP/ AP
