La revista Proceso prescindió de los servicios del articulista John M. Ackerman, el escrito Fabrizio Mejía y el cartonista Rocha, colaboradores del semanario indentificados con lo que se da en llamar la izquierda política.
El anuncio fue hecho por Ackerman en su cuenta de Twitter, quien dijo que no se trata de los problemas financiero que enfrenta la revista sino de una decisión que obedecería a intereses ideológicos y políticos, aunque la revista no ha explicado públicamente las causas de los despidos. “Nunca la revista había tenido tan poca pluralidad”, acotó Fabrizio Mejía.
Su director, Jorge Carrasco rechazó que se trate de un acto de censura o diferencias de corte ideológico y aludió a discusión provocada cuando Akcerman hizo declaraciones sobre el “periodismo sicario” que, dijo, no “pueden ser compartidas por esta casa editorial”.
Nunca la revista había tenido tan poca pluralidad. https://t.co/o9Z1sY0whJ
— fabriziomejía (@fabriziomejia) August 23, 2020
https://twitter.com/JohnMAckerman/status/1297663385962782725
@Proceso hace periodismo, @JohnMAckerman El proyecto político es el tuyo. Como te lo dije cuando hablamos, tus declaraciones sobre el "periodismo sicario" no pueden ser compartidas por esta casa editorial.
— Jorge Carrasco (@jorgecarrascoa) August 24, 2020
No te confundas. El periodismo de @proceso no se suma a ningún interés político. Ni al tuyo ni a ningún otro. Bien sabes lo que dicen los opositores a tu proyecto desde que, en una más de sus batallas por el acceso a la información, pidió las boletas de la elección de 2006.
— Jorge Carrasco (@jorgecarrascoa) August 24, 2020
Proceso fue de los pocos medios que dio voz a la izquierda, particularmente a Andrés Manuel López Obrador a lo largo de su trayectoria como opositor y mientras el fundador del semanario Julio Scherer García, estuvo al frente. Gracias a Proceso muchos de los gras actos de corrupción en este país se llegaron a conocer. Pero últimamente, si usted veía el trabajo de Rocha o las notas de Fabrizio Mejía, quedaba en claro que, además de Ackerman, ellos ya militaban con la Cuarta Transformación.
En cambio, Proceso ha sido un crítico duro del presidente López Obrador. Como antes lo hizo con los anteriores presidentes, si bien es acusado por los simpatizantes de la Cuarta Transformación de haberse “derechizado” en los últimos dos años y atribuyen esta nueva línea editorial a María Scherer Ibarra, la hija del fundador Julio Scherer García.
María Scherer es accionista mayoritaria de la revista Proceso y titular del Consejo de Administración de dicha publicación, luego de que su hermano Julio Scherer Ibarra, renunciara a ese cargo para formar parte del gobierno de López Obrador, como consejero jurídico de presidencia.
María Scherer está casada con Juan Ignacio Zavala, hermano de la ex candidata presidencial Margarita Zavala y cuñado del ex presidente Felipe Calderón, quien pretende volver a la función pública mediante su partido México Libre.
Recientemente, María Scherer se incorporó a Latinus, un medio abiertamente anti-AMLO que dirige Carlos Loret de Mola y pertenece a Miguel Alonso Olamendi, quien fuera secretario y mano derecha del actual gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.
(Con información de Polemón y Libertad bajo palabra)
