Con 50 copias en cines comerciales de la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Morelia se estrenará el documental Tierra de cárteles, sobre dos retratos íntimos: el del autodefensa de Michoacán José Manuel Mireles y el del líder del Arizona Border Recon de Estados Unidos, Tim Foley.
Por Columba Vertiz de la Fuente
Su director, el estadunidense Matthew Heineman, aclaró en conferencia de prensa que entre esos dos personajes no existen paralelismos. Lo que intentó, dijo, fue registrar qué motiva a las personas a levantarse en armas y aunque existen buenas intenciones, todo se sale de control, “eso sí lo vemos en los dos movimientos, pero sobre todo en Michoacán, lo que hizo que cayeran las autodefensas”.
En el Festival de Cine de Sundance 2015, Heineman recibió el premio a Mejor Director y el premio especial del jurado a Mejor Fotografía en la competencia Documental Estadunidense.
El filme, que el 3 de julio también se estrenará en Nueva York, documenta enfrentamientos entre los grupos de autodefensas en Michoacán y los miembros de Los Caballeros Templarios, así como historias de la gente que ha sido víctima del crimen organizado.
Del lado estadunidense, muestra a grupos de vigilantes que, equipados con armas largas y lentes de visión nocturna, defienden la frontera con México tanto del cruce de migrantes como del paso de cargamentos de droga, “pero he comprendido que sólo hay que enfrentar a los cárteles”, dice en la película Foley.
La producción ejecutiva de Tierra de cárteles estuvo a cargo de la ganadora de dos premios Óscar, Kathryn Bigelow (Zona de miedo, 2008; La noche más oscura, 2012).
El realizador, quien filmó durante nueve meses en Michoacán, destacó que Mireles y Foley cuentan con 55 años “y los dos están convencidos de que el gobierno les ha fallado, los dos están tomado la ley en sus propias manos y los dos están peleando por lo que creen.
“Sin embargo, las circunstancias son muy diferentes entre ellos, al comparar la violencia con Arizona, aquí en México es más real, de un nivel mucho más alto, se habla de que aquí 80 mil personas han sido asesinadas y hay 20 mil desaparecidas a partir del 2007 hasta la actualidad”, comentó.
Heineman rememoró cómo fue su acercamiento con las autodefensas en Michoacán:
“Primero empecé a filmar en Arizona porque ese era el documental en un inicio. Llevaba cerca de cinco meses allá grabando, cuando mi padre de repente me envió un correo electrónico sobre una nota informativa de los autodefensas aquí en México, y fue en ese momento en el que se me ocurrió incluir en el documental este paralelismo que existe entre estos dos grupos de ciudadanos que buscan justicia en ambos lados de la frontera.
“Entonces, empecé a contactarme con algunas personas que conocía en México, como algunos periodistas, de los cuales uno en particular estaba en contacto con Mireles y esa misma noche me contacté con el doctor Mireles y a las dos semanas ya estaba rodando en Michoacán”.
En ese momento, el director de la cinta pensó que el tema iba a ser mucho más sencillo, que era una historia más simple pero con el tiempo, dijo, y en la medida que fue evolucionando la historia, “fui descubriendo que estás líneas divisoras entre lo que es el bien y el mal en algún momento ya no eran tan claras.
“Entonces, empecé a ver que era más complicado de lo que me imaginaba y comencé a obsesionarme para regresar más veces y registrar con la cámara más material para averiguar y poder narrar qué estaba sucediendo.”
Siempre intento, dijo, “narrar esta problemática y situación de los autodefensas en Michoacán de una manera más visceral, más emocional, es decir, situarla sin los líderes de opinión o expertos, ofrecerla de una manera más real y más cercana, y en este proceso me enamoré en México”.
Antes de Tierra de cárteles, Heineman produjo y dirigió el largometraje documental Escape fire: The fight to rescue american healthcare (2012), un llamado de alerta sobre el estropeado sistema de salud estadunidense, la industria médica diseñada para curas rápidas y no un sistema de prevención, además del negocio en torno a estas áreas.
El filme se estrenó en el Festival de Sundance, ganó varios premios en festivales como Fullframe, Silverdocs, Newport Beach y Heartland, y fue nominado a los premios Emmy, evento que fue transmitido por CNN y sintonizado por más de dos millones de espectadores.
Fuente: Proceso