En este momento hay un desplazamiento del nicho ecológico de la influenza en favor del virus SARS-CoV-2, explica el subsecretario en la conferencia.
Prácticamente no ha habido influenza en México, destacó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, quien calificó este hecho como un “hallazgo notorio” durante la conferencia de prensa sobre covid-19.
El funcionario recalcó que en México se han mantenido tanto la vacunación como la vigilancia epidemiológica de influenza, con la misma intensidad que se vigila todos los años.
Al 12 de enero de 2021 hay 1,168,354 personas recuperadas de #COVID19. Hay 1,556,028 casos confirmados y 1,949,790 negativos. Se han registrado 135,682 defunciones confirmadas. 1/2 pic.twitter.com/4YPbkUgHtI
— Hugo López-Gatell Ramírez (@HLGatell) January 13, 2021
“Hemos tenido una vigilancia que convencionalmente para finales de diciembre, es decir, el periodo octubre, noviembre, diciembre, registra más de 50 mil casos en el Sistema de Vigilancia Centinela y hemos tenido dos o tres, son registros puntuales que ha habido de influenza”, detalló.
De acuerdo con López-Gatell, este fenómeno no es exclusivo de México, sino que se ha constatado que en Estados Unidos, Canadá y Europa Occidental no hay tampoco influenza. “Entonces esto nos da la tranquilidad de que no es un problema de detección, sino es realmente que no hay influenza”, subrayó.
Expuso que las explicaciones son varias, pero en términos ecológicos ya se ha observado en pandemias previas un fenómeno que se llama desplazamiento del nicho ecológico, añadió.
“Básicamente es un fenómeno complejo en el que ciertos virus tienen predilección por la especie humana, pero en ausencia de otros que hagan una especie de competencia por los sitios de infección que son los sujetos humanos.
“Es un fenómeno muy complejo, no tiene explicaciones únicas, pero se asume que en este momento hay un desplazamiento del nicho ecológico de la influenza en favor desde luego del virus SARS-CoV-2”, expuso López-Gatell.
Otras enfermedades, explicó, quedan sin representación, porque hay personas que dejan de acudir a consulta aun cuando tengan una necesidad de salud.
En este contexto consideró muy importante continuar la atención de personas que tengan todas las demás enfermedades posibles diferentes a covid-19, “pero cuando se ha priorizado el manejo de la epidemia, ciertamente en las unidades covid es sólo covid”, aclaró.
Sin importancia, 99% de mutaciones
En otro tema, López-Gatell explicó que la variante inglesa del virus SARS-Cov-2 causante de covid-19 no es una nueva cepa, sino es la misma pero mutada y la vacunación también funciona contra esta enfermedad.
“Hay cierta familia grande de los virus que tienen una mayor propensión a la mutación y en esa gran familia está el coronavirus SARS-CoV-2, los de la influenza e innumerables virus ARN y tienen una tasa de mutación extraordinariamente grande, cada 10 mil copias, en promedio, que se hagan del virus, aparece una mutación”, aseguró.
Señaló que más del 99% de las mutaciones no tienen ninguna importancia, incluso aclaró que muchas de ellas pueden disminuir la capacidad de los virus, lejos de aumentarla.
“Algunas de estas mutaciones pueden potencialmente conferirle ventajas biológicas, ecológicas a los virus y hacerles, por ejemplo, más transmisibles, más infectantes o más virulentos o escapar la respuesta inmune que los organismos potencialmente infectados desarrollan”, comentó.
Pero en este caso, el de la mutación inglesa, se habla de una variante caracterizada por 23 mutaciones puntuales en diversos fragmentos de la hebra del genoma ARN del SARS-CoV-2 identificada el 20 de septiembre de 2020 en el sur de Inglaterra y que fue notificada a la Organización Mundial de la Salud en la primera semana de diciembre de 2020.
“Una vez que fue notificada por parte del gobierno del Reino Unido se identificó que posiblemente, según algunos indicios, podría tener una mayor propensión a transmitirse. Existe cierta evidencia que sugiere que eso puede darle una ventaja al virus. No es un cambio, hay que destacarlo, no es un cambio de transmisibilidad que sea relevante. No quiere decir que se propaga como una ola en minutos, como es la idea que algunas personas tienen en mente”, añadió.
El punto de la mutación del virus es simplemente que el número de personas que cada individuo contagiado puede infectar aumenta en 70% partiendo de una transmisibilidad que, de acuerdo al número de parámetro de reproducción, es de 3 personas por cada infectante.
“No existe evidencia alguna de que esta variante, esta secuencia de cambios genéticos permita que el virus escape a la respuesta inmune inducida por las vacunas, tampoco necesariamente la respuesta inmune derivada de infecciones previas. Tampoco hay evidencia de que aumente la infectividad, es decir, la capacidad de causar infección y tampoco hay evidencia de que aumente la virulencia, es decir, la capacidad de causar enfermedad grave, tampoco que aumente la letalidad”, señaló.
Entonces, las agencias de salud pública y la OMS concluyen que la nueva variante no necesariamente representa una amenaza adicional a la propia existencia de la epidemia.
Fuente: Apro