En su viaje a México, el Papa Francisco podrá reunirse con quien desee.
Así lo aseguró en entrevista con Reforma Miguel Ruiz Cabañas, subsecretario para asuntos multilaterales y derechos humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
“El Papa tendrá completa libertad de reunirse en México con quien él decida. Tiene libertad”, afirmó.
En esta línea, Ruiz Cabañas rechazó que haya perplejidades en México por una eventual injerencia del líder religioso en asuntos internos del país.
“Ni se plantean los temas así. Se revisó el programa. De los asuntos internos de México pues no se habló. Se habló de la importancia de su viaje y del mensaje”, dijo.
La canciller Claudia Ruiz Massieu y Ruiz Cabañas se reunieron hoy con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, y con el inglés Paul Gallagher, el secretario de Relaciones con los Estados, en un encuentro a puerta cerrada sin la presencia de la prensa.
El objetivo de las reuniones, que duraron respectivamente una hora y media hora, celebradas en lengua española, fue revisar el programa del Papa, según contó Ruiz Cabañas.
“La Canciller quiso venir para afinar los detalles de la visita”, indicó.
En ese contexto, el subsecretario indicó que difícilmente habrá cambios de último minuto en la agenda de Francisco.
“No creo que puedan hacerse cambios sustantivos al programa a estas alturas”, aseveró.
Además, explicó que durante el encuentro en El Vaticano se abordaron otros asuntos sobre los cuales el Papa planea expresarse, algunos ya de conocimiento público, como la migración, el cambio climático, la pobreza, la injusticia social y la violencia.
“Hablamos de migración, de narcotráfico, de la asamblea general de (las Naciones Unidas sobre) drogas, de que hay que poner el ser humano como el centro de todas las políticas”, afirmó.
“No veo una sorpresa ahí. (El Papa) siempre ha hablado mucho de migración, de la pobreza, de la criminalidad, de las injusticias, del sistema económico mundial”, agregó Ruiz Cabañas, quien también conversó a solas con el maltés Antoine Camilleri, subsecretario de Relaciones de la Santa Sede con los Estados.
El subsecretario hizo hincapié en que la estadía de Francisco en México tiene un carácter doble, al ser una visita pastoral y también oficial, y subrayó que la preparación de la gira, a nivel logístico, ya acabó.
“Al Papa se le recibirá como jefe de Estado”, aseveró, “habrá una platica importante sobre las relaciones entre México y El Vaticano”.
En este marco, se dijo convencido que la visita arrojará resultados muy positivos.
“Pensamos que va a tener un efecto muy positivo, no sólo en las relaciones entre México y El Vaticano, sino un mensaje de optimismo y de esperanza para el futuro”.
Asimismo, indicó que el Papa llamará con énfasis al desarme, incluido el nuclear, durante su estancia en México; un tema sobre el cual el Gobierno mexicano y Francisco están alineados, aseguró.
“Nos dijeron que se abordará ese tema. El Papa está en contra del armamentismo, en particular el armamentismo nuclear, igual que nosotros, por cuestiones de seguridad nacional”, explicó.
Tras su reunión en Roma procedente de Arabia Saudita, Ruiz Massieu voló a Suiza, mientras que Ruiz Cabañas se desplazará en breve a Nueva York.
La canciller no estuvo disponible para dar declaraciones a la prensa.
Fuente: Reforma
