El gobierno de Enrique Peña Nieto tendría en la mira este año terminar con el dominio de los empresarios Carlos Slim Helú y Emilio Azcárraga Jean en el sector telecomunicaciones al promover leyes que afectan a estos dos agentes preponderantes.
Un artículo del semanario inglés The Economist, destaca que la primera pista para pensar que así será fue la promulgación de una nueva Ley de Telecomunicaciones que crea un nuevo regulador para el sector, así como su propuesta para sancionar hasta con 10 años de cárcel las conductas anticompetitivas.
“Llevar una verdadera competencia a estos negocios podría hacer maravillas para la economía de México, que en algunas industrias se asemeja a los Estados Unidos antes de la Ley Antimonopolio Sherman de 1890”, destaca la publicación.
Actualmente, América Móvil, de Carlos Slim, tiene 80% del mercado de telefonía fija y 70% del mercado de telefonía celular en el país, “incluso para los estándares de América Latina sus servicios con muy caros, lo cual ha sido tan rentable al grado que el señor Slim es uno de los hombres más ricos del mundo”.
Por su parte, Televisa, de Azcárraga Jean, tiene alrededor del 70% del mercado de la televisión abierta en el país, y casi la mitad de la televisión de paga, lo que eleva los precios de la publicidad y las suscripciones.
La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) ha reconocido en distintos estudios que la falta de competencia en estos mercados “disfuncionales” cuesta al país alrededor de 1.8% del Producto Interno Bruto (PIB) y abrir el sector ayudaría a acelerar la economía.
Tras la captura del narcotraficante más buscado del mundo, el semanario asegura que ahora Peña tiene la mira puesta en los dos empresarios.
“Un nuevo regulador de telecomunicaciones en breve decidirá si sus empresas son tan poderosos que deben ser obstaculizados con normas más estrictas que sus competidores y el Presidente debe asegurarse de que en ambos casos se aplique la ley”, destaca la publicación.
Destaca que tanto América Móvil como Televisa han esquivado los intentos anteriores para romper con su predominancia, al ejercer una “influencia excesiva” sobre los reguladores y en parte porque la ley de competencia estaba lleno de vacíos que les permitieron utilizar los tribunales para evitar la aplicación de las leyes.
“Esto debe cambiar con la reciente creación de una nueva, el regulador más poderoso Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) que el 9 de marzo tendrá que declarar si ambas empresas son dominantes, “que claramente son, y por lo tanto deben ser objeto de una regulación más estricta”.
Destaca la publicación que el Ifetel ya ganó el primer round a Televisa al permitir que las empresas de cable retransmitan sus señales sin tener que pagar una cuota, por lo que augura que el siguiente paso deberá ser el permitir que otras empresas de telefonía puedan acceder a la infraestructura de América Móvil para que puedan ofrecer más servicios.
Señala que Slim ya estaría listo para aprovechar cualquier decisión en contra de Televisa al haber asegurado la opción de compra de Dish México, siempre y cuando los reguladores lo aprueben.
“Dish, un advenedizo de cinco años de edad, ya ha contribuido a reducir los precios de televisión de paga en México, y podría ir más allá en manos de Slim. Es por ello que Televisa está tan alarmado por la decisión del Ifetel”.
Pero también advierte que si Televisa tuviera acceso a las redes de América Móvil, podría ofrecer a sus suscriptores servicios de telefonía ancha.
El artículo concluye que abrir la competencia en el sector también beneficiaría a los consumidores, y pone como ejemplo lo que sucedió en Gran Bretaña en 2006 cuando British Telecom (BT), en antiguo monopolio estatal de telecomunicaciones, tuvo que abrir sus redes y permitir el acceso a nuevos competidores.
“Los consumidores disfrutan ahora de una amplia variedad de paquetes a precios competitivos de telecomunicaciones”.
Fuente: Sin Embargo y The Economist