Los palestinos cumplen este lunes 69 años desde que fueron expulsados de sus hogares durante la guerra de 1948 que llevó a la creación de Israel. Muchos se establecieron en Cisjordania reocupada, Gaza, Jordania, Siria y Líbano.
Como refugiados, varias cartas de la Organización de Naciones Unidas (ONU) les dan derecho a ellos y a sus descendientes a tener trabajo y una vida digna hasta que puedan regresar a sus hogares, pero en Líbano, los palestinos sufren discriminación en casi todos los aspectos de la vida cotidiana, alimentando una desesperación que está desgarrando a su comunidad.
Muchos viven en asentamientos reconocidos oficialmente como campamentos de refugiados, pero mejor descritos como guetos de hormigón rodeados de retenes y, en algunos casos, de muros y alambradas. La ONU dirige escuelas y subsidia la atención de la salud en su interior.
En Líbano hay 450 mil refugiados registrados en 12 campamentos, donde las autoridades locales no tienen jurisdicción. En los días tranquilos, los niños juegan en callejuelas húmedas y los comerciantes estacionan sus carritos de productos en las calles principales del campamento.
Fuente: AP
