Familiares de los 43 normalistas desaparecidos en Ayotzinapa, Guerrero, arribaron a Monterrey para reclamar al gobierno federal la falta de voluntad política para esclarecer los hechos y exigir que el proceso se concentre en un solo expediente.
En dos autobuses, los padres, madres y hermanos de los jóvenes desaparecidos arribaron al sindicato de Telefonistas, donde anunciaron que mañana llegarán a Matamoros, Tamaulipas, para pedir en el Juzgado Primero de Distrito copia de todos los expedientes del caso y anexarlos a la indagatoria que realiza la Unidad Especializada.
“Queremos que se deseche esa verdad histórica que, más bien, fue mentira histórica de que nuestros compañeros fueron asesinados e incinerados en el basurero de Cocula, porque ya quedó plenamente demostrado por el grupo de peritos forenses argentinos que no fue así”, señaló Vidulfo Rosales Sierra, abogado de los familiares de los estudiantes.
Agregó que las cuatro nuevas líneas de investigación que abrió la Unidad Especializada deben recibir todo el apoyo institucional de la Procuraduría General de la República “porque la versión del basurero de Cocula ya no tiene asidero”.
Mario César González, padre del estudiante desaparecido César Manuel González, de 19 años, acusó al gobierno federal de “estar jugando con nosotros, por eso vamos a presionar en todas las instancias porque ya no queremos que vuelva a ocurrir un ataque como el de Iguala y aunque los padres de familia hemos sido muy masacrados por el Estado no nos vamos a rendir”.
Por su parte, Emiliano Navarrete, padre de José Angel Navarrete, de 18 años, señalo que “a casi 17 meses no hemos tenido una respuesta seria del gobierno, nos mintieron, nos mintió el ex Procurador (Jesús) Murillo Karam. No sabemos qué hicieron nuestros hijos para sufrir esta agresión tan cobarde”.
La caravana de familiares salió el 22 de febrero de la Ciudad de México y realizó una parada en la ciudad de Querétaro, otra en San Luis Potosí. Este martes pernoctarán en Monterrey y a primera hora del jueves saldrán rumbo a la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, distante 250 kilómetros, para después dirigirse a Matamoros en un trayecto de 90 kilómetros más.
El 26 de septiembre de 2014, 43 estudiantes de la escuela Normal “Isidro Burgos”, de Ayotzinapa, Guerrero, fueron desaparecidos por grupos criminales y policías municipales, cuando se dirigían a una protesta en Iguala.
Fuente: La Jornada
