Ahora se trata de la embajada de Honduras en Bogotá, en donde se realizó una fiesta que terminó en saqueo y desordenes excrementales. Al parecer, a las mujeres, las engañaron con el pago.
Un escándalo con prostitutas en la embajada de Honduras en Colombia fue denunciado por el diario El Heraldo de Tegucigalpa y confirmado por la policía de Bogotá
Según ese medio de comunicación, la fiesta fue organizada por el hondureño Jorge Mendoza, quien sería un “empleado personal” del embajador Carlos Humberto Rodríguez.
“Los amigos y las servidoras de sexo que Mendoza introdujo a la sede que representa al Estado de Honduras no solo se robaron lo que pudieron, sino que hasta hicieron sus necesidades fisiológicas en la oficina del propio embajador y del agregado militar”, destaca el diario.
En Bogotá, el Canal Caracol reveló que a las mujeres no les pagaron el dinero acordado y por lo tanto ingresaron a las oficinas y se llevaron equipos y material valioso.
Según el Coronel José Baquero, responsable de la seguridad en el norte de Bogotá, sede de la embajada, la fiesta comenzó pasadas las 11 de la noche del 20 de diciembre y se extendió hasta las cinco de la mañana.
El diario digital hondureño dice que Mendoza, tras salir “de fiesta por la ciudad” regresó a la embajada borracho y acompañado por unos “amigos colombianos”.
Luego de eso, habrían recogido a “varias prostitutas” en el barrio Santa Fe, centro de Bogotá, “y las llevaron para la oficina diplomática”.
“Al amanecer, aturdidos por el alcohol y el sexo, las prostitutas y los amigos de Mendoza abandonaron la oficina, llevándose todo lo que encontraron a su paso”, reseña el diario.
Entre los equipos que se robaron estarían, dice el medio, el computador portátil de Stephanie Cañahuate, Ministro Consejero en asuntos económicos, así como los teléfonos celulares de varias personas que trabajan en la embajada “y que acostumbraban a dejar pertenencias en sus oficinas, por cuestiones de seguridad”.
“Pero lo más detestable que encontró el personal de la embajada es que se habían defecado en la oficina del propio embajador e incluso encima del escritorio del agregado militar, el coronel Sergio Gómez”.
El diario dice que con estos bochornosos hechos “se ha vulnerado la seguridad nacional”.
“Cualquier capo, por ser Colombia el principal productor de cocaína en el mundo, pudo haber pagado a una prostituta para que sedujera al amigo del embajador para entrar a la representación y robar información vital sobre investigaciones. Igualmente, en cada embajada de Honduras se guardan cables diplomáticos sobre análisis geopolíticos de los países en donde se encuentran las misiones que pudieron quedar expuestos”, precisa El Heraldo.
La ‘presta-diplomacia’ tuvo un escándalo en 2011 cuando en Cartagena, Colombia, unidades del Servicio Secreto de la Casa Blanca contrataron unas prostitutas y al parecer por no pagarles las mujeres hablaron y el episodio le dio la vuelta al mundo y hasta sirvió para la publicación de un libro.
La embajada de Honduras no se ha pronunciado y se espera que la Cancillería de ese país emita una declaración sobre el nuevo caso de ‘presta-diplomacia’.
Fuente: Voz de América