El jurado del galardón, considerado el Nobel de Literatura en español y dotado con 125.000 euros, ha destacado «su brillante carrera como novelista», su «lengua literaria llena de sutilezas» y «su extraordinaria proyección internacional»
Eduardo Mendoza (Barcelona, 1943) ha sido galardonado con el Premio Cervantes 2016, según acaba de hacer público el ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, en la sede de la Secretaría de Estado en Madrid. Considerado el Nobel de Literatura en español y dotado con 125.000 euros, este galardón reconoce la trayectoria de los escritores que hayan contribuido a enriquecer el legado literario hispano.
El jurado le ha otorgado el premio a Eduardo Mendoza «porque, con la publicación en 1975 de ‘La verdad sobre el caso Savolta’, inaugura una nueva etapa de la narrativa española en la que se devolvió al lector el goce por el relato y el interés por la historia que se cuenta, que ha mantenido a lo largo de su brillante carrera como novelista». En la estela de la mejor «tradición cervantina», Mendoza «posee una lengua literaria llena de sutilezas e ironía, algo que el gran público y la crítica siempre supieron reconocer, además de su extraordinaria proyección internacional».
Nacido en Barcelona en 1943, se licencia en Derecho en la Universidad Autónoma de la Ciudad Condal y reside en Nueva York desde 1973 hasta 1982, donde trabaja como traductor en la ONU. Durante su estancia en la ciudad estadounidense debuta con «La verdad sobre el caso Savolta» (1975), novela con la que logró el Premio de la Crítica y que junto con «El misterio de la cripta embrujada» (1979) se llevó a la gran pantalla.
En 1982 publicó «El laberinto de las aceitunas», «Campo de la verdad» y «Los soldados de plomo», que fue llevada al cine por José Sacristán. En 1986 publica «La ciudad de los prodigios», que Mario Camus adaptó a la gran pantalla en 1999 y con la que ganó el premio Grinzane Cavour (1988, Italia) y el Ciutat de Barcelona. En 1986, junto con Miguel Narros, versiona y traduce «El sueño de una noche de verano», de William Shakespeare.
En 1989 publica «La isla inaudita» y en 1990 estrenó su primera obra de teatro, «Restauració». Un año después llegaría «Sin noticias de Gurb» y en 1992 escribe una novela colectiva detectivesca junto con Félix de Azúa, Manuel Vázquez Montalbán, Juan Marsé, Andreu Martín, Jesús Ferrero, Javier Fernández de Castro y Francisco González Ledesma.
[Los mejores libros de Eduardo Mendoza]
En 1993 recibe el premio literario Elle por su obra «El año del Diluvio», y en 1996 publica «Una comedia ligera», elegida como Mejor Libro Extranjero (1998, Francia). En 2001 edita «La aventura del tocador de señoras», por la que recibe el premio del Gremio de Libreros de Madrid y publica el ensayo «Pío Baroja». En 2002 publica «El último trayecto de Horacio Dos» y en 2004 estrena la obra teatral «Greus qüestions» (Graves cuestiones) en el Festival de Temporada Alta de Gerona.
Años fructíferos
No vuelve a publicar hasta 2006, con otra obra de teatro, «Glòria», y otra novela, «Mauricio o las elecciones primarias», que obtiene el premio de Novela de la Fundación José Manuel Lara Hernández. Los siguientes años son áun más fructíferos: «¿Quién se acuerda de Armando Palacio Valdés?» (2007), «El asombroso viaje de Pomponio Flato» (2008) y «Tres vidas de santos» (2009), donde debuta en el género del relato. Bajo el seudónimo de Ricardo Medina, Mendoza ganó el premio Planeta en 2010 con «Riña de gatos. Madrid, 1936». En 2015 logró el premio Franz Kafka, concedido por su trayectoria literaria y en el que destacó, especialmente, su obra «La verdad sobre el caso Savolta»; ese mismo año apareció «El secreto de la modelo extraviada», su más reciente novela.
El mexicano Fernando del Paso fue galardonado el año pasado. Anteriormente, fueron distinguidos Juan Goytisolo, Elena Poniatowska, Caballero Bonald, Nicanor Parra, Ana María Matute, José Emilio Pacheco y Juan Marsé, entre otros.
En esta edición, el jurado ha estado formado por Juan Goytisolo y Fernando del Paso, los dos últimos ganadores, así como de miembros propuestos por la RAE, la Academia Salvadoreña de la Lengua Española, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), la Unión de Universidades de América Latina, el Instituto Cervantes, de la Asociación Internacional de Hispanistas y de las federaciones de Asociación de Periodistas de España, de la latinoamericana de periodistas y por el ministro de Educación, Cultura y Deporte.
Fuente: ABC.es