El abogado Filiberto Terrazas Villanueva, quien representa al hijo mayor de Juan Gabriel, Alberto Aguilera Junior, informó que la tarde de ayer un juez penal del estado giró orden de aprehensión contra Silvia Urquidi, quien se ostenta como propietaria de una casa y la escuela de música del desaparecido cantautor.
El también historiador dijo que los delitos de los que es acusada son despojo, allanamiento de morada, agravio y robo de 20 centenarios que había escondidos en la casa de la avenida Lerdo y de las instalaciones de la escuela de música que fundó el cantautor del que igualmente fue su abogado.
Terrazas Sánchez aseguró que la aparición de varios supuestos hijos del artista se debe a los millones anuales que producen las regalías de su música y la fortuna de alrededor de 100 millones de dólares que dejó su antiguo cliente.
Señaló que Urquidi puso en comodato la casa de Lerdo aún y cuando sus escrituras no aparecen en el Registro Público de la Propiedad y en semanas pasadas anunció que la convertiría en museo a partir de agosto.
Esa casa fue habitada varios años por el hijo mayor de Juan Gabriel, quien es buscado por la justicia de El Paso, Texas, acusado del delito de acoso a funcionario por el que no alcanza fianza, por lo que se publicó su nombre en la lista de los más buscados en la región.
El abogado expresa que solamente en Juárez, Juan Gabriel tenía cuatro casas, tres de ellas de lujo, así como una vivienda modesta donde vivió su mamá con sus hermanos que llegaron procedentes de Michoacán.
Otras casas de lujos las tiene en Acapulco, Michoacán, San Miguel de Allende, Cancún, El Paso, Texas, Miami, Santa Fe, Nuevo México y tenía otra en los Ángeles, de acuerdo a lo que le conoció en propiedades, aparte de las cuentas en México y Estados Unidos.
Expresó que desde el 2016, un mes después de su muerte alertó de que habría pleito por la herencia debido a que uno de sus hijos dijo ser el albacea, que es una mentira jurídica y desde esa fecha han surgido hijos tras hijos sin tener registro legal o pruebas y utilizan a los medios, principalmente los estadunidenses para decir que ellos son parte de esa familia.
Recordó que mientras trabajó con Juan Gabriel contaba con poder notarial para representarlo en pleitos y cobranzas y entre los asuntos que le arreglé fueron dos adeudos, uno en Estados Unidos, donde debía alrededor de dos y medio millones de dólares de impuestos y otro en México.
Desde hace años se sabe que Juan Gabriel compraba casas al por mayor, pero tras los problemas de deudas de impuestos, cambió los títulos de propiedad a nombre de terceros para que no le fueran confiscadas.
Fuente: La Jornada
