La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó la libertad de 11 policías del Distrito Federal, entre ellos un mando medio, por considerar que no tuvieron responsabilidad en la muerte de 12 personas en la discoteca News Divine, el 20 de junio de 2008.
La decisión fue adoptada por la Primera Sala en la sesión de este miércoles, a propuesta del ministro Arturo Zaldívar, pero aún debe resolver los casos de otros policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina implicados en la tragedia, donde la mayoría de las víctimas fueron jóvenes.
La Primera Sala deberá pronunciarse además sobre la legalidad del operativo que derivó en la caída del entonces titular de la SSP, Joel Ortega, actual director del Sistema de Transporte Colectivo, Metro.
Los ministros consideraron que esos 11 policías de la SSP no pueden ser imputados porque el día de la tragedia recibieron la orden de conformar un muro de contención afuera del establecimiento ubicado en la colonia Nueva Atzacoalco, al nororiente de la Ciudad de México.
La actuación de esos uniformados “se encuadró en el cumplimiento de un deber de cuidado, sin que fuera previsible para ellos lo que sucedía dentro y sin que tuvieran la obligación de preverlo”, dice la resolución adoptada.
Además de los 12 muertos, entre ellos dos policías preventivos, también hubo siete personas heridas a consecuencia del operativo realizado por la SSP con el apoyo de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Según el gobierno capitalino, el operativo era para impedir la venta de alcohol y droga a menores de edad.
Los ministros consideraron que la tragedia se debió a que muchos de los jóvenes que estaban en el News Divine se acumularon en un pequeño túnel aledaño a la puerta principal y permanecieron atrapados durante unos 10 minutos.
Esa circunstancia no puede ser atribuida a los policías que estaban afuera, por lo que decidieron otorgarles un amparo “liso y llano”, que se traduce en su libertad inmediata.
La Corte estableció que la tragedia se originó por tres hechos: el cierre de la puerta del lugar al inicio del operativo, la presión que ejercieron los policías que entraron sobre los jóvenes para que salieran del lugar, y la decisión de apagar las luces y el aire acondicionado, lo que ocasionó la falta de aire y generó un ambiente sofocante.
La presión de los jóvenes atrapados, añadió, provocó que se venciera una de las puertas y cayeran algunas personas que fueron proyectadas hacia al exterior, pero fueron pisoteadas por la turba.
Ante esa circunstancia, varios elementos de la SSP recibieron la orden de conformar un muro de contención en esa puerta, que se mantuvo durante unos tres minutos para controlar la salida de los jóvenes.
Fuente: Proceso